MADRID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El proyecto para la Villa Olímpica de la candidatura de Madrid 2016 consistirá en una combinación de torres de hasta diez metros de altura con bloques más pequeños, y en los que habrá entre 3.000 y 4.000 viviendas, además de una policlínica, un centro de seguridad, aparcamientos, zonas verdes, comedores y hoteles, según informó hoy la Universidad San Pablo CEU, centro en el que trabajan los redactores del proyecto, los arquitectos y profesores Jorge Javier Camacho y María Eugenia Maciá Torregosa.
Ambos han resultado ganadores del Concurso Internacional de Ideas convocado por el Ayuntamiento de la capital para desarrollar la Villa Olímpica, en la que todas las construcciones estarán dotadas de los medios para garantizar su eficiencia energética, entre otras cosas, mediante el aprovechamiento de la luz solar en invierno y de los sistemas de ventilación natural en verano.
La Villa Olímpica, que se transformará en un barrio más de la ciudad después de celebrar los Juegos, contará asimismo con otras instalaciones para dar servicio a los más de 17.000 atletas que se alojarán en ella durante la cita olímpica y paraolímpica, siempre que Madrid sea elegida sede el próximo 2 de octubre en Copenhague.
Además, todo el ámbito estará centralizado en torno al Estadio Olímpico, actual Estadio de La Peineta, que deberá ser remodelado para albergar hasta a 30.000 espectadores siempre y cuando se firme un convenio definitivo con el Club Atlético de Madrid, entidad encargada de sufragar la reforma y propietario de la instalación tras los Juegos.
PRESTIGIO INTERNACIONAL
El proyecto de Jorge Javier Camacho y María Eugenia Maciá Torregosa ha sido muy avalado por los arquitectos del jurado, entre los que se cuentan Dominique Perrault, Jacob van Risk, Patxi Mangado y Carlos Ferrater. Destacables especialmente son su características de sostenibilidad y funcionalidad frente a la 'arquitectura espectáculo', que "no siempre es sencilla de llevar a la realidad y que muchas veces carece de la eficiencia necesaria", apuntó el CEU San Pablo.
En este sentido, una de las "principales virtudes" del proyecto es "la facilidad de adaptar los edificios a usos futuros, además de su calidad como viviendas y de su atractivo visual", continuó la universidad.
Antes de este concurso, los profesores y arquitectos han ganado otras convocatorias, entre las que destacan el proyecto de Auditorio del Campo de Criptaza, recientemente asignado.