Una madrileña denuncia que se encontró "una cosa" parecida a "sesos" en un brik de tomate al hacer macarrones

MADRID, 6 (EUROPA PRESS)

El pasado día 1 de noviembre, una vecina del barrio de Vallecas, Mari Carmen Muñoz, cuando se disponía a verter el contenido de un brik de tomate sobre los macarrones que estaba cocinando para una comida familiar, observó "una cosa", "algo como una tira de pescado", de aspecto viscoso que cayó de dentro del contenido, como "sesos" que le provocaron "asco y arcadas", según reveló el diario '20 minutos'.

En declaraciones a Europa Press, Muñoz aseguró que, en un primer instante, pensó que era "algo como una tira, algo de pescado". Sin embargo, cuando abrió "el bote de tomate", comprobó que era algo más parecido a "sesos". "No me lo creía porque parecía una oreja, lo eché a la pila, lo lavé y es otra cosa, algo como sesos, es que no sé lo que es", confesó.

Según Mari Carmen, lo primero que hizo fue llamar a su familia, que se encontraba reunida en su hogar para comer juntos en día festivo, "para que lo vieran". A continuación trató de ponerse en contacto con la propia compañía y con el servicio al consumidor, pero no le descolgaron, porque era "fiesta y no había nadie".

Al día siguiente, 2 de noviembre, el servicio al consumidor si contactó con ella, pero la "marca Orlando", firma fabricante del bote de tomate en cuestión, no le contestó. Sin embargo, días después, "se han puesto en contacto conmigo y estamos hablando, me dicen que no les haga pupa, que si denuncio por televisión les estoy haciendo daño", aseguró.

Así, Mari Carmen opinó que la empresa "no se da cuenta del daño" que le han hecho, por lo que insistió en que les va a denunciar por la OCU, por Sanidad y Consumo. "Por todo lo que haga falta", subrayó.

Por último, destacó como "prueba" de que no se "inventa" el hecho, que "estaba toda la familia delante". "La prueba es que he abierto el tomate, lo tengo grabado por mi móvil y que no me lo invento", aclaró. Además, aseguró que cambiará de marca de tomate "directamente".

Por su parte, la postura oficial de la empresa fabricante, en una nota informativa remitida a Europa Press, aduce que "es imposible que cualquier elemento extraño se pueda introducir en el envase de brik durante el proceso de producción y llenado, debido a los controles de seguridad y calidad" y que éste se "realiza en un entorno cerrado y con las mayores garantías higiénico-sanitarias".