La delegada no cree que la situación tenga una solución "a corto plazo" y pide una hoja de ruta para solucionar el conflicto
MADRID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
La delegada de Urbanismo y Vivienda, Pilar Martínez, pidió hoy a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que convoque una reunión "urgente" con la Delegación del Gobierno y los municipios implicados en la Cañada Real Galiana, un poblado situado a unos 20 kilómetros de la capital en el que se desencadenó una batalla campal entre los vecinos y la policía a raíz del derribo de una vivienda ilegal.
Martínez, tras una reunión con el presidente de la Asociación de Trabajadores e Inmigrantes Marroquíes en España (ATIME), Kamal Rahmouni, argumentó que la situación de la Cañada Real "desborda los límites del municipio de Madrid, afectando a cinco localidades", por lo que considera que es problema de "carácter metropolitano".
"De hecho, no es sólo un tema urbanístico. También hay problemas de integración social, educativos, de salud pública y de seguridad, entre otros, por lo que en un mismo espacio se producen situaciones muy diversas que requieren de atención singular", afirmó la dirigente.
Según Martínez, el Ayuntamiento de Madrid está "empeñado en eliminar los núcleos de infravivienda" y está haciendo "todo lo posible" por evitar que la Cañada siga creciendo, pero el carácter metropolitano y complejo de la situación requiere de la colaboración y la acción conjunta de las tres administraciones. "Particularmente, de la Comunidad de Madrid", apuntilló.
"Es imprescindible", continuó, "la colaboración y el apoyo de las organizaciones no gubernamentales, las asociaciones de vecinos y, de los jueces y tribunales para evitar que la situación pueda deteriorase".
Asimismo, reconoció que esta situación "no tiene solución a corto plazo" y que si no se actúa "desde ahora y de forma conjunta, los problemas de convivencia metropolitana no harán sino empeorar".
Por último, reiteró que la Comunidad de Madrid tiene que convocar dicha reunión, algo que ya solicitó en septiembre el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y en ella confeccionar "una hoja de ruta" para solucionar el problema de la Cañada Real, un poblado donde se calcula que viven unas 40.000 personas.
