Ocho detenidos, en su mayoría de nacionalidad francesa de origen argelino
MADRID, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional desarticularon una importante banda criminal asentada en la Costa del Sol, cuyas actividades eran tráfico de armas, secuestros, atracos, asesinatos, tráfico de drogas y robo de vehículos, siendo detenidos en la operación ocho personas, la mayoría de nacionalidad francesa pero de origen argelino, uno de los cuales tiene pendiente una condena de 35 años en Francia
La operación ha sido llevada a cabo por los Grupos de Crimen Organizado de UDYCO con base en Marbella, Málaga, Torremolinos y Fuengirola. Se ha desarrollado un fuerte despliegue policial en la que han actuado los Grupos de Operaciones Especiales (GOES) y el servicio de helicópteros con base en Málaga.
Se practicaron cuatro registros domiciliarios de forma simultánea, interviniéndose numerosas armas de fuego, munición, chalecos antibala, material de última tecnología, vehículos sustraídos de alta gama, joyas y 1500 Kilos de polen de hachís.
Las primeras investigaciones se llevaron a cabo en Marbella, donde se detectó en la urbanización El Arenal a tres integrantes de este grupo, conocidos por su alta peligrosidad. El domicilio que ocupaban, no habitado de forma permanente, se trataba de una "vivienda de seguridad" habilitada para preparar acciones delictivas y como lugar de reunión.
Posteriormente se identificó a otros miembros de la organización, localizando a su vez otro domicilio, en el Cerro de Artola de Benahabís (Málaga), desde donde se dirigían e impartían instrucciones para la comisión de hechos delictivos. Un tercer domicilio descubierto, situado en la localidad de Coín, era utilizado como lugar de residencia de la organización y como vivienda de seguridad. El cuarto registro se realizó en la localidad de Mijas-costa, urbanización Cala Hills, donde se incautó abundante documentación.
DENUNCIA DE SECUESTRO EN TORREMOLINOS
Un ciudadano holandés denunció en la Comisaría de Torremolinos un presunto delito de secuestro, siendo las víctimas dos compatriotas suyos. Los investigadores descubrieron que los secuestradores se equivocaron de objetivo y que los dejaron libres tras descubrir su error. No obstante durante el periodo de tiempo en el que permanecieron retenidos, las víctimas fueron torturadas por sus captores. El secuestro se llevó a cabo en un chalet de la localidad de Coín, donde posteriormente se localizaron efectos relacionados con este secuestro.
Esto llevó a la Policía Nacional a seguir la pista de los delincuentes, que fueron finalmente detenidos en los distintos 'pisos francos' que tenían repartidos por la costa, en una rápida operación de registros simultáneos.
