Archivo - La presidenta de la Asamblea de Madrid en la XII Legislatura, María Eugenia Carballedo, comparece ante los medios tras una reunión con la presidenta de Madrid a 14 de junio de 2021, en Madrid (España). Carballedo inicia hoy una ronda de contac - Alberto Ortega - Europa Press - Archivo
MADRID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Asamblea de Madrid, Eugenia Carballedo, se ha mostrado este martes "más que tranquila" con su decisión de expulsar a la diputada del PSOE Carmen López del Pleno pasado por hacer acusaciones al hermano de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, porque tenía que ejercer su función y "hacer respetar el decoro y la democracia".
"No pude tomar otra decisión distinta. Estoy más que tranquila con la decisión que tomé, porque efectivamente no pude tomar otra, Reglamento en mano", ha trasladado Carballedo en declaraciones a los periodistas en los pasillos de la Cámara regional, al tiempo que ha reconocido que la inviolabilidad que tienen los diputados para no ser perseguidos judicialmente por lo que manifiesten en el hemiciclo "no impide el régimen disciplinario y esos derechos sean efectivos".
Según ha explicado la presidenta de la Asamblea, los deberes que tienen los parlamentarios son la asistencia obligatoria al Pleno, adecuar la actitud en el Pleno al reglamento y respetar el orden de la disciplina y la cortesía Parlamentaria.
"Cuando un diputado vierte palabras o conceptos en contra de las reglas de las cortesía parlamentaria la presidenta debe llamar al orden a ese diputado. Cuando un diputado impide la buena marcha, la presidenta debe llamar al orden a ese diputado y es lo que hice en tres ocasiones, darle oportunidades de que recondujera la situación, evitar a seguir imputando delitos graves a una persona en concreto, lo cual va en contra de toda regla de cortesía parlamentaria. Nunca se había hecho hasta ahora", ha expuesto.
Carballedo luego ha incidido en que ya no es que esté tranquila, sino que se toma "en serio" ser presidenta de la Asamblea y hacer respetar el decoro y la democracia es lo que ella "debe hacer".
En cuanto a que los grupos parlamentarios de izquierda hayan registrado una reprobación contra ella, ha asegurado que respeta las opiniones de todos los grupos pero que nada le va "a impedir" que se haga respetar a los diputados fuera y dentro del hemiciclo. "A la presidenta no le queda otra que ejercer su función", ha defendido.