Tribunales.- "Mi padre me violaba. Todavía tengo miedo porque es capaz de todo", declara una víctima de incesto

Actualizado: miércoles, 30 abril 2008 17:59

Su madre relata los episodios de malos tratos vividos en el ámbito familiar y confiesa que su ex marido la violó en una ocasión

MADRID, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -

Una mañana del verano de 1999, Irene S.M. se encontraba en su habitación haciendo los deberes. Su padre entró en el dormitorio, la desnudó y la violó. La joven tenía 12 años, pero sufría abusos y malos tratos desde los 7 años. Entonces no entendía lo que pasaba. Se quedaba paralizada cada vez que Julián S.A. la agredía sexualmente. En febrero de 2005, decidió denunciarle tras un nueva nueva violación.

"Mi padre me violaba. Todavía tengo miedo porque es capaz de todo", declaró hoy la joven tras el biombo que le separaba de su agresor, quien se sentó en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Madrid por cinco presuntos delitos de agresión sexual. Tras detenerle, el hombre cumplió 17 días en prisión preventiva. El juez que tramitó el caso le dejó en libertad al considerar que no había motivos para pensar que podría fugarse.

En el trámite de conclusiones, la fiscal solicitó a la Sala que le condene a 69 años de prisión al dar credibilidad al testimonio de la víctima, "suficiente para destruir su presunción de inocencia". Además, exigió que se le imponga la prohibición de aproximarse a su hija en una distancia de 500 metros, así como comunicarse con ella durante diez años por cualquier medio. También pidió que le indemnice con 30.000 euros por los daños morales.

El procesado aseguró que los hechos eran "totalmente falsos", atribuyéndolos a "una venganza" de su hija por ser demasiado estricto, como "cualquier padre". "Es tan sencillo como que meramente es una venganza porque no hacía lo que quería. Yo era un objeto que me tenía que quitar de su lado porque no se hacía conmigo", sostuvo el hombre, quien explicó que perdió "el control" de Irene desde que comenzó a trabajar en el turno de noche en su empresa y conoció al hijo de su jefe, con quien vive actualmente con su familia. "Tengo un concepto claro de padre. A las personas no se las educa con palos, sino con razonamientos", añadió.

"ESTABA DUCHÁNDOME Y ABUSÓ DE MÍ"

En contra de su relato, la chica desgranó una por una las agresiones y abusos sexuales a las que le sometió Julián. "La primera vez que me tocó tenía 7 años. Estaba duchándome y abusó de mí. En verano de 1999, mi padre entró en mi dormitorio. Me penetró. Yo era pequeña y no entendía lo que hacía. Él nunca decía nada", narró. Esta misma escena se repitió en la primavera de 2000

En 2001, Irene estaba en la habitación, cuando su progenitor se abalanzó sobre ella. "Me tumbó en el sofá --relató--, me quitó la parte de arriba, me tocó mucho y me penetró". Del mismo modo, el procesado la violó en abril de 2002. La agresión que motivó que la joven acudiera a denunciar los hechos se produjo el 21 de febrero de 2005. "Me disponía a ducharme, cuando entró y me llevó en volandas a la habitación, donde me tumbó en la cama. Chillaba, pero me penetró. Intenté quitármelo de encima".

Al margen de las violaciones, la víctima pormenorizó a la Sección 23 el enrarecido ambiente familiar, con malos tratos de su padre hacia su madre y sus otros dos hermanos. Por ejemplo, contó cómo su padre le dio un puñetazo a su madre o cómo una vez lanzó a su hermano pequeño, con tan sólo unos meses de vida, al suelo.

Virginia M.R, su madre, refrendó la versión de su hija. "Julián tenía un carácter muy violento. La tomaba con los muebles y con nosotros. A mí me violó una vez", confesó la mujer, explicando al tribunal que nunca le denunció porque pensaba que algún día se curaría. Frente a su relato, otra de sus hija negó que su padre les hubiera maltratado, si bien indicó que "las broncas" en el seno familiar eran "normales".