MADRID, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Policía Científica encontró en uno de los bolsillos del anorak de Gabriel P.S, acusado de degollar a Alba M.L. en el mirador del Parque de Pradolongo, en el distrito de Usera, ropa interior de mujer, aunque por el momento se desconoce si podía pertenecer a la víctima, de 17 años.
Así lo manifestó hoy una de las agentes de este Cuerpo que compareció en la tercera sesión del juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid contra Gabriel, que se enfrenta a 18 años de prisión por un delito de homicidio y otro de robo con violencia.
Según su testimonio, la Policía Científica recorrió, a instancias del Grupo Sexto de Homicidios, tanto el escenario del asesinato como los lugares donde el acusado arrojó su ropa y la mochila robada a la chica, con la finalidad de recoger muestras de lo sucedido.
A escasos metros donde se halló el cadáver de Alba, la Policía localizó varios mechones de pelo ensangrentados. Unos estaban en una barandilla, lo que indicaría que Gabriel, según la agente, podría haber "limpiado" el arma homicida, y otros entre los arbustos. En una zona con "bastante vegetación", se encontró el cuchillo jamonero con el que Gabriel acabó con la vida de la menor.
OCULTACIÓN DE PRUEBAS
Para las acusaciones particulares, que representan a los padres de Alba por separado, es fundamental demostrar que Gabriel no tenía anuladas las facultades intelectuales por los efectos de las drogas, puesto que tras asesinar a la joven escondió el arma homicida y trató de ocultar pruebas, tal y como quedó reflejado con la declaración de esta miembro de la Policía Científica.
El recorrido de los agentes continuó en un descampado próximo a la estación de Renfe de Orcasitas, donde se localizó la camiseta y la chaqueta del chándal de Gabriel, de los que se había desprendido porque estaban manchados de sangre de la víctima. Los agentes llegaron a este lugar, ya que un vecino de la zona alertó a la Policía que había visto a una persona tirar ropa en esa zona.
Acto seguido, la Policía Científica se trasladó a la estación de Orcasitas, en cuyas vías estaba el anorak del procesado y la mochila de Alba. A este lugar llegaron por las propias indicaciones de Gabriel, quien desveló tanto a los agentes de Homicidios como a los que le tomaron declaración en la Comisaría el lugar exacto donde se había deshecho de estos objetos.
NO RECUERDA
En la primera sesión, Gabriel aseguró que no recordaba nada de lo que sucedió la tarde del 5 de marzo porque desde el día anterior había consumido "elevadas cantidades" de alcohol y drogas.
"No recuerdo lo que pasó. Sabía que había hecho algo mal, pero no sabía el qué. Mi conciencia no estaba tranquila", manifestó el hombre, que fue detenido la misma noche de los hechos en el Gregorio Marañón.
El procesado, que admitió ser toxicómano, repitió en varias ocasiones que no recordaba nada. Tan sólo se acordaba de que un día antes había salido del trabajo y se había ido "al bingo, a varios bares y a pillar cocaína".
"No me acuerdo cómo llegué ahí ni de dónde saqué el cuchillo. No sé ni quién es Alba", declaró el hombre, que actualmente se encuentra bajo tratamiento en el programa de Proyecto Hombre en la prisión madrileña de Soto del Real.
El procesado señaló que desde abril de 2004 se encontraba por propia voluntad bajo supervisión médica, pero admitió que seguía consumiendo cocaína. "Es una adicción que arrastró desde los 17 años. En dos días no puedo dejar de consumir", dijo.
