Actualizado 14/02/2017 13:19

Los concesionarios españoles aumentaron un 7,5% sus ingresos en 2016

Congreso de Faconauto
EUROPA PRESS


MADRID, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los concesionarios españoles de vehículos cerraron el pasado año con un volumen de ingresos de 30.686 millones de euros, lo que se traduce en un incremento del 7,5% en comparación con 2015, según anunció el presidente de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto), Jaume Roura.

En el XXVI Congreso Nacional de la Distribución de la Automoción, Roura indicó que este aumento de la facturación de los puntos de venta en España durante el año pasado se explica por la progresión de las matriculaciones de automóviles nuevos en el conjunto del mercado español, lo que ocasionó también una mejora del empleo y de la rentabilidad.

Así, las redes de distribución de vehículos en España contabilizaron una rentabilidad sobre facturación del 1,58%, una cifra que, según Roura, aleja "un año más" las expectativas de los concesionarios que continúan solicitando a los fabricantes que sitúen la rentabilidad entre sus prioridades, ya que las empresas "no nacen para tener pérdidas" y destacó que el "anhelado" objetivo es el 3%, un porcentaje que ya es una realidad en Estados Unidos.

Por otro lado, los datos positivos del sector del automóvil en España y el incremento de la cifra de negocio en 2016 también derivaron en un incremento del 5% en el volumen de empleo de las redes de distribución en España, que cerraron el ejercicio pasado con un total de 153.928 trabajadores directos, mientras que el número de empleos indirectos se situó en cerca de 550.000 personas.

No obstante, aseguró que entre 2007 y 2016 se ha producido una fuerte reducción del número de empresas en el sector de la distribución de vehículos en España, pasando de 6.817 compañías en el último año antes de la crisis a 4.036 empresas al cierre de 2016, lo que supone una caída de más del 40% en este período.

Así, estos datos confirman la relevancia que tiene la distribución y la reparación de vehículos sobre el conjunto de la economía española, con un peso del 2,79% sobre el conjunto del PIB nacional, mientras que las inversiones en instalaciones y tecnología de estos centros se situaron en 1.850 millones de euros.

PLAN DE RENOVACIÓN.

Por otro lado, el directivo resaltó la importancia de la puesta en marcha de un plan de incentivo a la compra de automóviles a cambio de achatarrar uno antiguo de carácter intensivo y extendido en el tiempo, como "una pieza clave" para frenar el envejecimiento automovilístico español, que de no hacer nada, en 2020 tendrá un 65% de vehículos con una edad media de más de diez años.

En este sentido, Roura afirmó que un plan estructural de renovación es la única medida efectiva capaz de reducir la edad media del parque. "En otros momentos de nuestra historia reciente este tipo de planes ha revelado su utilidad y ha sido beneficioso para un sector tan importante como la automoción", añadió, al tiempo que recordó que por cada euro que aporta el Gobierno a este tipo de planes tiene un retorno de tres euros para las arcas públicas por diferentes conceptos.

Para el año actual, la organización contempla que el mercado español de turismos y todoterrenos se sitúe "ligeramente por encima" de 1,2 millones de unidades, lo que supondrá un estancamiento y representará aproximadamente el mismo nivel de 2018.

STOP A LAS 'AUTOMATRICULACIONES'.

Ante esta situación, el presidente de Faconauto solicitó a las marcas de automóviles que no "caigan en la tentación" de pedir un mayor porcentaje de 'automatriculaciones', una situación por la que están atravesando diferentes redes de distribución, que además se han tenido que enfrentar a unos objetivos "demasiado ambiciosos" y alejados de la realidad del mercado.

Por ello, desde la federación reclamaron que tanto los concesionarios como las marcas trabajen de forma conjunta para mantener los logros conseguidos en los últimos años con el fin de mantener un mercado fuerte que apoye también a que las factorías también lleguen a su objetivo de fabricar tres millones de vehículos al año en España.

"Si la economía de España creció un 3% en 2016, y se prevé un 2,5% en 2017, no se puede perjudicar un sector tan importante como el nuestro, por ello, pedimos mejoras fiscales para el automóvil que incentiven tecnologías eficientes y seguras. Asimismo, es necesario que se cese la presión fiscal a las empresas, por los adelantos del impuesto de sociedades", subrayó.