MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El mercado de turismos y todoterrenos usados se situó en 132.944 unidades durante el pasado mes de enero en España, lo que supone una subida del 18,49% respecto al mismo mes del año anterior, según datos de la Asociación Nacional de Comerciantes de Vehículos (Ancove), que prevé que al cierre de 2017 el volumen alcance 1,87 millones de unidades (+6%).
La organización explicó que el crecimiento comercial del mercado de ocasión en España se justifica por la demanda de vehículos de más de diez años, que coparon el 56,5% del total, mientras que los de menos de cinco años registraron una cuota del 27%, al tiempo que los de entre cinco y diez años se hicieron con el 16,5% del total.
Ancove destacó que el peso de los vehículos de mayor antigüedad facilitó la presencia de transferencias de propiedad entre particulares, que representaron el 47,7% del total de las ventas de coches usados durante el pasado mes de enero.
Ante este dato, la asociación apuntó que la transferencias registradas por la DGT entre particulares "esconden" en muchas ocasiones actividad de "pseudoprofesionales" que se dedican a la compraventa de las unidades de mayor antigüedad del mercado.
"Un negocio que está fuera de la ley y que supone un aumento del riesgo de los propietarios y los pasajeros de esos vehículos, pero también de otros usuarios de las vías públicas, pues no han pasado una revisión mínima para la venta, carecen de garantías legales que sí tienen los coches vendidos en los comercios y, en muchas ocasiones, estos coches no tienen la ITV al día", añadió.
El presidente de la asociación, Elías Iglesias señaló que en Ancove están "esperanzados" con el buen arranque del año y se mostró confiado en que esta tendencia se mantenga a lo largo de 2017, aunque manifestó su preocupación por que la falta de un Plan PIVE para la compra de vehículos nuevos esté induciendo a muchos particulares a vender sus coches a compraventas callejeros.
"Estos vehículos, especialmente los que sobrepasan los 14/15 años de antigüedad, deberían ir al desguace, o al menos, pasar una revisión previa que asegure su viabilidad para continuar en las carreteras y calles españolas. El envejecimiento del parque está aumentando y no se invertirá si no se hace algo para impedir que estos coches continúen circulando", añadió Iglesias.
En este sentido, calificó como "imprescindible" la puesta en marcha de un plan de achatarramiento de vehículos de segunda mano que contribuya a erradicar la venta ilegal y a rejuvenecer realmente el "anticuado" parque español.
Al mismo tiempo, señaló que la regulación de las ventas ilegales contribuiría a consolidar un mercado de segunda mano mucho más transparente y seguro para todos, en el que habría coches revisados y mantenidos, gracias a las garantías legales, y también menos contaminantes.
