MURCIA, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
La abuela del bebé y la madre hallados muertos en San Javier (Murcia) por una intoxicación por dióxido de carbono (CO2), originada por un brasero, se encuentra estable, ingresada en planta del Hospital Los Arcos del Mar Menor y permanece en observación, según han informado a Europa Press fuentes de la Consejería de Sanidad.
Al parecer, el suceso se produjo por la mala combustión de un brasero clásico, alimentado con picón o carbón de pequeño tamaño, que también provocó una intoxicación grave de la abuela del pequeño, según se desprende del primer parte facilitado por la médico forense en base a los hechos acaecidos y la observación ocular de las víctimas y la situación.
Así lo hizo saber en rueda de prensa el delegado del Gobierno en la Región de Murcia, Joaquín Bascuñana, quien especificó que, según este primer informe, todo apunta a que la mujer y su bebé sufrieron la denominada 'muerte dulce', provocada por la intoxicación derivada de la mala combustión.
Al parecer, la mujer fallecida acudía habitualmente a realizar labores domésticas en la casa de una señora que, extrañada de que no fuera a trabajar, decidió llamar sobre las 19.00 horas de este miércoles al ex marido de la víctima, militar destinado al Arsenal de Cartagena, para aclarar lo que estaba sucediendo.
A la empleadora le extrañaba que la limpiadora no se hubiera presentado a trabajar, y la puerta de la casa de la víctima estaba totalmente cerrada, por lo que llamó al Arsenal.
Una vez alertado, el ex marido de la fallecida se presentó en el domicilio de las víctimas, ubicado en la urbanización EuroRoda de San Javier, y comprobó que la vivienda estaba completamente cerrada y que no había señales de vida, por lo que avisó a Policía Local, según el relato de Bascuñana.
La Policía Local fue la que llevó las actuaciones para abrir la puerta de la vivienda y, al entrar, los agentes notaron una especie de mareo propio de una mala combustión de un brasero.
Ante estos hechos, los policías alertaron a la Guardia Civil solicitando su intervención. Finalmente, los agentes de la Policía Judicial de la Benemérita se presentaron en el lugar sobre las 23.15 horas y observaron que, en el interior, había una mujer fallecida, un niño muerto y una persona mayor en estado grave.
El delegado del Gobierno ha confirmado que la mujer fallecida también era militar, destinada al Cazaminas Tajo, y ha precisado que actualmente se está estudiando el tiempo que ha transcurrido desde que se ha producido la muerte hasta que se descubren los cadáveres.
No obstante, los investigadores deducen que no ha transcurrido excesivo tiempo porque la señora mayor está todavía viva. "Ha podido ser durante el mismo día", explica Bascuñana, quien advierte, no obstante, que este dato no se sabrá con exactitud hasta que lo certifiquen los forenses.
