El fiscal pide penas que suman 90 años de cárcel para seis de los acusados por un delito de homicidio
MURCIA, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los abogados defensores de los siete individuos, de nacionalidad lituana, a los que un Jurado Popular juzga desde este martes en Murcia acusados de matar en septiembre de 2011 a un compatriota, cuyo cadáver escondieron en un pozo, han coincidido en señalar el carácter "agresivo" de la presunta víctima, que incluso "llegó a fanfarronear de que ya había apuñalado en Ucrania y en España a otras personas".
En la primera sesión del juicio que se celebra en la sección tercera de la Audiencia Provincial de Murcia, las defensas han alegado que "no abandonaron como a un perro" a la víctima, a la que, según el escrito de calificación del Ministerio Fiscal, apalearon en el transcurso de una disputa y tras "propinarle numerosos golpes y con un bloque de hormigón, con el palo de una escoba, con el mango de una pala y con el de una azada", lo ocultaron en un descampado a fin de que no fuera localizado por la Policía muriendo finalmente y arrojando su cadáver en el fondo de un pozo, cubriéndolo con escombros y objetos.
Los abogados de los siete acusados han pedido la libre absolución de los mismos, puesto que recuerdan que fue la víctima, de la que han señalado su carácter "agresivo", quien acuchilló a uno de ellos e inició lo ocurrido.
De hecho, una de las defensas ha recordado que cuando uno de sus compatriotas acudió a quitarle el cuchillo éste "les amenazó de muerte y les dijo que cuando todos estuvieron durmiendo en la casa, ya que él no vivía allí, entraría y los mataría a todos".
Asimismo, han afirmado que las peleas es algo que es "común" en los países del Este y que también están acostumbrados "a beber" grandes cantidades de alcohol y que ese día "iban ciegos".
Para el fiscal, los hechos son constitutivos de un delito de homicidio, por el que pide para seis de los acusados la pena de 15 años de cárcel. Para el séptimo acusado, al que le acusa de un delito de encubrimiento, procede imponer la pena de tres años de prisión.
