BARCELONA 19 May. (EUROPA PRESS) -
Un hombre de edad avanzada que vive en la avenida del Paral·lel de Barcelona invitó hoy al alcalde y candidato del PSC a la reelección, Jordi Hereu, a vivir durante dos días en su hogar para que compruebe el ruido nocturno que hacen las motos y las sirenas de ambulancias y servicios municipales.
El vecino aprovechó la visita de Hereu a la Muestra de Entidades del Poble Sec, en la plaza de los Ocellets, para quejarse del ruido que emiten los vehículos que circulan por la avenida Paral·lel. "Le invito a pasar 48 horas en mi casa: todo pagado y le aseguro que comerá muy bien", señaló el hombre.
"Las motos hacen un ruido ensordecedor a las 2, a las 3 y a las 5 horas de la madrugada" y "esto no es respetar para nada al ciudadano", lamentó el vecino, quien también se quejó por el paso de las sirenas, protesta que la semana pasada también le trasladó a Hereu el propio ex presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall.
UN VOTANTE DEL PSC ENFADADO.
Pese a sus protestas, de las que Hereu dijo que tomará nota, el vecino admitió que no puede esconder sus preferencias políticas. "Lo votaré a usted, pero si no me hacen caso, yo tampoco le haré caso a usted", le advirtió al alcaldable socialista.
Poco después y tras la reprimenda del vecino, una mujer del barrio se le acercó para pedirle al candidato del PSC que se hiciera una foto con su hija, a lo que Hereu aceptó gustosamente, ni que fuera para quitarse el mal sabor de boca.
Tras su visita al barrio del Poble Sec, Hereu, acompañado de la edil Assumpta Escarp, participó en el almuerzo popular de la fiesta mayor del Eixample. Antes, se acercó al mercado de la Concepció, donde probó un plato de ternera, que los tenderos distribuían, y cerezas ecológicas.
En el interior del mercado, que en aquellas horas ya estaba prácticamente vacío, Hereu se encontró con una madre acompañada de su hija, que no tendría más de nueve años. "Hola guapa, ¿te gusta venir al mercado?", le preguntó Hereu, mientras la niña asentía, aunque más avergonzada que nunca.