El actual director de la cárcel de Alhaurín reconoce que dio la orden de requisar los cuadernos a Roca

MÁLAGA 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

El actual director de la cárcel malagueña de Alhaurín de la Torre, Antonio Guerrero, reconoció hoy que fue él quien dio la orden de retirar cinco cuadernos al ex asesor de Urbanismo de Marbella (Málaga), Juan Antonio Roca, imputado en el caso 'Malaya', en el momento en el que iba a ser trasladado a la prisión de Albolote (Granada), ya que era el responsable de Seguridad del centro.

Guerrero declaró hoy durante algo más de una hora y en calidad de imputado en el Juzgado de Instrucción número 5 de Málaga, que investiga la retirada de cinco libretas de Roca, tras la querella presentada por éste por los delitos de revelación de secreto, apropiación indebida y contra los derechos fundamentales.

Fuentes judiciales indicaron a Europa Press que el actual director aseguró al juez en su comparecencia que esos cacheos y requisos formaban parte de su trabajo como responsable de Seguridad y que se trata de una práctica habitual en los casos de traslados de los internos.

Otras fuentes señalaron que Guerrero dijo en su declaración que él sí tuvo acceso al contenido de las libretas, pero incidió en que no el resto de funcionarios que habrían intervenido en el proceso. Los documentos fueron puestos a disposición del juzgado de Instrucción número 5 de Marbella, que investiga el caso 'Malaya' y del que dependía Roca.

Esta citación se produce después de que el entonces responsable de la prisión, Angel Herbella, declarara como imputado en esta causa en Madrid y asegurara que él no tuvo los cinco cuadernos en su poder y que no dio la orden expresamente de que se le requisaran, sino que se dictó la orden escrita de cacheo "dentro los cometidos del subdirector de Seguridad".

Según el informe remitido desde la prisión en el momento de la entrega de los cuadernos en Marbella, incluido en el sumario del caso 'Malaya', los cuadernos fueron requisados por haber "indicios suficientes de que los escritos podían contener datos relativos a personas --funcionarios, internos y otros-- y sobre las instalaciones y edificios del establecimiento", lo que podría constituir "un grave peligro para la seguridad del centro".

Esos documentos contenían "numerosos dibujos y croquis de las instalaciones del centro", así como una relación pormenorizada de días "figurando en cada uno de ellos los nombres de los funcionarios que hacían servicio en el módulo 2", señalando, también, los turnos de mañana, tarde y noche, según se precisa en el texto remitido al juzgado marbellí.

Asimismo, las libretas contenían 14 biografías de presos, con nombres, apellidos, apodos y datos íntimos, así como una serie de siglas, abreviaturas y menciones a personas y empresas "ajenas al mundo de la prisión". Por último, el informe indica que otro capítulo si es a modo de diario, con las incidencias del día a día y sobre lo que lo que le requisaban o las llamadas de atención que le hacían los funcionarios, a los que llama "cobardes".

El juez instructor, Miguel Angel Torres, se inhibió y remitió a Málaga las diligencias abiertas tras el informe. Esta causa recayó en el Juzgado de Instrucción número 1 de Málaga, que citó a declarar a Roca como imputado en un delito de amenazas en relación a esas libretas, aunque archivó las diligencias por no existir delito alguno.

Paralelamente, Roca presentó una querella contra el director del centro penitenciario por los delitos de revelación de secreto, apropiación indebida y contra los derechos fundamentales. La representación de Herbella, que ostenta un abogado del Estado, ha solicitado el sobreseimiento de la causa en la que está imputado.