El acusado de espiar a López Benjumea dice que nunca ha seguido a nadie y que no recibió órdenes del PSOE

Actualizado: lunes, 19 noviembre 2007 19:17

López Benjumea tilda de "absolutamente dantesco" la preparación del espionaje

SEVILLA, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

El hombre acusado de perseguir al ex presidente de la Caja San Fernando Juan Manuel López Benjumea, Antonio Castellano, quien ha declarado hoy en calidad de testigo en la primera sesión del juicio por el caso del espionaje que publicó el diario 'El Mundo' el 29 de noviembre de 2001, donde acusaba al presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, de espiar al presidente de la caja andaluza, dijo hoy que nunca ha perseguido a nadie y que no ha recibido órdenes del PSOE.

En la vista oral, Castellano ha explicado que se reunió con el detective contratado por López Benjumea por temas de trabajo relacionados con el embargo de una vivienda, aunque reconoció que finalmente dicho detective le preguntó por su supuesta relación con el espionaje al representante de la entidad bancaria.

"Me llamó un detective y me dijo que quería entrevistarse conmigo preguntándome que quién me había ordenado perseguir a Benjumea por lo que me puse en contacto con Escámez --el jefe de escoltas de Chaves--, que es de mi pueblo, y me dio su tarjeta por si tenía algún problema", expuso Castellano, quien precisó que "nunca había sido contratado para perseguir a nadie".

"El día que vi la noticia en el periódico lo puse en conocimiento de la Policía para que constara que eso era totalmente falso", apostilló Castellano, quien afirmó que a lo mejor fue "engañado".

"ABSOLUTAMENTE DANTESCO".

Por su parte, el ex presidente de la Caja San Fernando Juan Manuel López Benjumea tildó de "absolutamente dantesco" la hipótesis de que contactara con el director de 'El Mundo' de Andalucía, Francisco Rosell, y el periodista de dicho rotativo F.J.C. para preparar el asunto del espionaje que publicó el citado diario.

En la primera sesión del juicio que comenzó hoy en el Juzgado de lo Penal número 3 de Sevilla por un presunto delito de injurias graves con publicidad cometido por el diario 'El Mundo', el ex presidente de Caja San Fernando y un detective contratado por éste, el acusado López Benjumea expuso que en septiembre de 2001 "sospechaba" que una persona lo estaba siguiendo, por lo que lo puso en conocimiento de la Delegación del Gobierno y además contrató al detective privado también acusado por esta causa, J.C.P.

Al cabo del tiempo el detective entregó a López Benjumea una cinta de vídeo y otra de audio que había grabado de manera independiente, donde supuestamente se desvelaba la identidad de quien estaba siguiendo al director de dicha entidad bancaria.

Por su parte, el detective reconoció que el trabajo para López Benjumea lo comenzó en septiembre, cuando, según explicó, le advirtieron de que "alguien del PSOE o de la banda terrorista ETA" estaba siguiendo al presidente. "Me dieron el número de matrícula de un coche" que supuestamente "seguía a Benjumea y me dijeron que era de un tal Antonio Castellano".

"Me puse en contacto con él y me dieron instrucciones para grabar una entreviste", indicó el investigador privado, quien aseguró que se citó con Castellano en un bar pocos días antes de la polémica publicación de 'El Mundo'.

La conversación que mantuvieron en un bar el detective y la persona que presuntamente seguía a López Benjumea fue recogida "con una grabadora de bolsillo y una cámara" que estaba fuera del establecimiento, aseveró J.C.P., quien, según continuó, no hizo "ningún montaje" con las grabaciones.

El procesado manifestó también que el 28 de noviembre de 2001 remitió a López Benjumea la cinta original de la grabadora "que tenía en el bolsillo" con otras dos cintas de vídeo, cuyas imágenes habían sido grabadas "desde una azotea", y una tarjeta de visitas del jefe de escoltas de Manuel Chaves, Juan Escámez, que supuestamente le había dado Castellano.

"Benjumea no me pidió que fundiera en una sola cinta el audio y el video" y al día siguiente "volvió a llamarme para que llevara las cintas al periódico 'El Mundo'". A pesar de que el inculpado negó en el Juzgado de Instrucción que llevara las cintas al diario "por recomendación del abogado", en el día de hoy ha reconocido que transportó las cintas pero "en ningún momento hubo montaje".

Asimismo, el detective precisó que "el señor Castellano ha mencionado a Chaves y a Pizarro" pero "no tan detallado" como recoge 'El Mundo' en su información del 29 de noviembre.

"INFORMACIÓN CONTRASTADA".

En su declaración, el periodista imputado F.J.C. dijo que mantuvo una cena con el que fuera delegado del Gobierno y actual alcalde de Granada, José Torres Hurtado, y con su jefe de gabinete, J.A.V., quienes reconocieron "que Benjumea había presentado una denuncia porque estaba convencido de que lo seguían". Ante tales afirmaciones, el periodista agregó que Torres Hurtado descartó que ETA estuviera detrás del presidente de la Caja San Fernando.

Por ello, el periodista, junto al director del periódico, Francisco Rosell, llamaron a López Benjumea, quien, según el periodista, "ratificó lo que habían dicho desde la Delegación del Gobierno" y aportó que un detective había averiguado que la persona que lo seguía aseguraba que "entre Pino, Pizarro y Chaves" le habían mandado "seguir a Benjumea y Beneroso". "Nos pusimos en contacto con el detective, quien nos dio detalles concretos y una tarjeta de visita de Castellano y otra de Escámez", prosiguió el profesional de la información.

En el juicio, el periodista dijo que publicó la información porque tenía "un hecho noticiable con una fuente fidedigna" y porque "había contrastado la información" incluso con el secretario de organización del PSOE-A, Luis Pizarro, quien supuestamente le dijo "que eso era un montaje de alguien que se había puesto muy nervioso". "Un periodista cuando tiene una noticia le quema en las manos. Si no la publicamos rápido nos la hubieran pisado ya que 'ABC' sacó lo mismo a los dos días", concluyó el inculpado, quien mantuvo que "nunca nos pidieron que rectificáramos la información".

El cuarto de los acusados, Francisco Rosell, aseveró que el presidente de la Caja San Fernando "ratificó las informaciones previas que teníamos" por lo que "nos pusimos en contacto con el detective, quien nos explicó el vídeo y nos aclaró que las diferencias que había entre las imágenes y el sonido se debían a que la cámara estaba en una azotea y la grabadora en su bolsillo".

Según el escrito de acusación particular, al que tuvo acceso Europa Press, la representación jurídica de Chaves considera que López Benjumea "concibió, organizó y puso en ejecución" un plan tendente a "influir" en el proceso de renovación de cargos en los órganos de administración de la Caja San Fernando del año 2001.

En este sentido, el letrado de Chaves asegura que el otrora presidente de la citada caja de ahorro y acusado por este caso creó en su entorno "la falsa apariencia de estar siendo objeto de seguimientos por parte de terceros".

Así, López Benjumea, que contrató al también acusado J.C.P como detective privado, "consiguió" el fin que perseguía, es decir, la publicación de aquellos "falsos" seguimientos a su persona, "con atribución de su organización" a Manuel Chaves, al secretario de Organización del PSOE-A, Luis Pizarro; al ex jefe de escoltas de la Junta, Juan Escámez, y al ex presidente de la Diputación de Sevilla Miguel Angel Pino.

De esta manera, un vídeo en el que aparecen dos supuestos colaboradores de López Benjumea, A.C.A. y J.C.P., y en el que sólo resulta entendible la frase: "Entre Pino, Pizarro y Chaves me han mandado seguir a Benjumea y Beneroso" fue filtrado a los también acusados Francisco Rosell, director de 'El Mundo' de Andalucía, y al periodista de dicho rotativo F.J.C., que tenían un conocimiento previo de la noticia a través de la Delegación del Gobierno en Andalucía.