Un acusado de integrar una célula terrorista islamista admite que le propusieron hacer la 'yihad' fuera de Europa

Actualizado: lunes, 26 febrero 2007 17:12

MADRID, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -

El marroquí Khalid Zeimi Pardo, acusado en el juicio que se sigue en la Audiencia Nacional contra una presunta célula terrorista islamista fundada por Mustapha "El Maimouni", preso en Marruecos por los atentados de Casablanca del 16 de mayo de 2003, admitió hoy ante el tribunal que el marroquí Amer Azizi, considerado el responsable militar de Al Qaeda en Europa, le propuso hacer la yihad, en su acepción de cometer atentados contra los infieles, fuera de Europa.

Zeimi, que estuvo imputado en el 11-M, aunque no fue procesado, se enfrenta a una petición fiscal de 10 años de prisión por un delito de integración en organización terrorista islamista. El fiscal Pedro Rubira sostiene que Zeimi se sumó a una célula de la corriente salafista de los Grupos Islámicos Combatientes Magrebíes dirigida por "El Maimouni", su cuñado Sarhane Ben Abdelmajid "Serhane El Tunecino", uno de los siete terroristas que se suicidó en Leganés (Madrid), y Faisal Allouch, que también estuvo imputado en el 11-M y para el que se piden 12 años de cárcel como dirigente de organización terrorista.

Durante su interrogatorio, Zeimi explicó que vino a Madrid desde Tánger (Marruecos) en 1998 para continuar sus estudios. Apuntó que estuvo viviendo en la mezquita del barrio madrileño de Estrecho durante siete meses y, a continuación, estuvo trabajando en la mezquita de la M-30 de Madrid, donde conoció a "El Tunecino", quien por entonces trabajaba en la gestión del restaurante de esta mezquita e impartía clases de castellano en la de Estrecho.

Relató al tribunal que durante esos años entabló una relación de amistad con "El Tunecino", al igual que lo hacía con muchos musulmanes que acudían a ambas mezquitas a rezar. Contó que un domingo éste le invitó a desayunar a su piso de la calle Martín Gaite de Leganés tras haber estado practicando deporte durante la mañana. Una vez en el domicilio, señaló, "El Tunecino" le mostró un vídeo sobre "víctimas en algunos países del mundo", pero subrayó que se negó a verlo porque "salía sangre" y se mareaba.

AZIZI Y "EL EGIPCIO".

Zeimi explicó que en esos años también conoció al marroquí Azizi, que permanece desaparecido, porque era traductor en la mezquita de la M-30. Señaló que en una ocasión éste le propuso hacer la yihad fuera de Europa, a lo que se negó porque en esos momentos sólo le preocupaba su familia. Según apuntó, a partir de ese momento dejó de mantener contactos con Azizi.

A preguntas sobre Rabei Osman el Sayed "Mohamed El Egipcio", uno de los 29 acusados en el juicio por los atentados de Madrid y que se enfrenta a 38.658 años de cárcel por la masacre, Zeimi explicó que era "un sin techo" que solía acudir a la mezquita de Estrecho para recibir algún tipo de ayuda. Reconoció que a finales de 2002 le invitó a su casa y que no supo más de él. Agregó que se enteró de que estuvo en Francia y en Italia por la prensa a raíz de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid.

Respecto a "El Maimouni", Zeimi admitió que le alojó en su casa durante un mes después de conocerle en la mezquita de la M-30, donde vendía hierbabuena. Relató que un día estando por esta mezquita "El Tunecino" le pidió por estar documentado que fuese segundo testigo de su unión civil con la hermana de "El Maimouni", ocultándole la identidad del primer testigo.

Según Zeimi, se trataba del confidente policial y testigo protegido conocido como "Cartagena", que fue quien delató ante la Unidad Central de Información Exterior (UNIE) a los integrantes de esta célula durmiente que según el fiscal se preparaba para atentar en España.

Preguntado sobre si conocía a los acusados, Zeimi explicó que mantenía una relación laboral con Allouch, quien le hizo los rótulos para su negocio y le invitó en una ocasión a un bautizo en su casa. El procesado negó haber participado en el domicilio de Allouch en reuniones de adoctrinamiento para preparar al grupo en el yihaidismo e insistió en que "no comparte esta ideología" por practicar "la corriente sufí que está en contra de cualquier tipo de violencia".

También apuntó que mantuvo otra relación laboral con Mohamed El Ouzzani, quien se enfrenta también a 10 años de prisión por integración como mero integrante. Admitió que un día se fue con El Ouzzani y su familia a bañarse a un lago próximo a la central nuclear de Zorita (Guadalajera), donde fueron detenidos por la Guardia Civil.

INVESTIGADOS POR LA UCIE.

En la sesión de esta mañana comenzó la prueba testifical con la declaración de un policía de la UCIE que instruyó las diligencias de Mohamed El Ouzzani y Zeimi, a quien se les investigaba como parte del entorno de Allouch, "El Maimouni y "El Tunecino". El juicio continuará esta tarde con la declaración de varios testigos.

El funcionario subrayó que El Ouzzani y Zeimi reconocieron durante su declaración policial haber participado en diversas reuniones en las que Azizi les incitaba a hacer la yihad contra los infieles. Tras desaparecer este último en noviembre de 2001, "El Maimouni" le relevó como dirigente del grupo, al que siguió "El Tunecino" cuando el anterior fue detenido en Marruecos por los atentados de Casablanca.

El agente explicó que la célula juzgada se remonta a la investigación que se abrió sobre un grupo de marroquíes en el sur de Madrid a raíz de las operaciones Nova I y Nova II, que se iniciaron cuando un testigo protegido alertó de la pretensión de un grupo de islamistas radicales que pretendía volar la Audiencia Nacional. Añadió que la investigación sobre los integrantes de esta célula se intensificó tras los atentados de Casablanca del 16 de mayo de 2003.