Ampl.-Azkarate ratifica en el TSJPV el compromiso de Ibarretxe por el diálogo sin exclusión y niega que haya delinquido

VITORIA, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -

La portavoz del Gobierno vasco, Miren Azkarate, ratificó hoy ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) el compromiso del Ejecutivo por el diálogo sin exclusiones y recordó que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, no ha incurrido en un delito de desobediencia al reunirse con representantes "de la izquierda abertzale" porque no existe una orden judicial que se lo haya prohibido expresamente.

Azkarate, que compareció ante los medios de comunicación a las cinco de esta tarde en Lehendakaritza para explicar cuál fue su testimonio de esta mañana ante el juez instructor del 'caso Ibarretxe', Roberto Sáiz, señaló que su declaración "ha servido para ratificar lo que el lehendakari, el Gobierno vasco" y ella misma, como portavoz del Ejecutivo, han manifestado "en numerosas ocasiones", como es "el compromiso" en favor del diálogo.

En este sentido, afirmó que el máximo representante del Gobierno vasco y el tripartito mantienen su "compromiso para buscar la paz y lograr los acuerdos políticos a través del diálogo sin exclusiones con todas las sensibilidades políticas de este país".

Azkarate consideró que, cuando se está intentando hablar con los representantes de las distintas formaciones políticas, se "necesita pulsar la opinión de quienes realmente son los líderes naturales y los dirigentes" que "tienen capacidad para trasladar qué es lo que se piensa dentro de cada mundo y cuáles son sus propuestas de futuro".

"En eso estamos empeñados el lehendakari y el conjunto del Gobierno. Difícilmente un diálogo practicado con la finalidad de conseguir la paz y de conseguir acuerdos políticos, puede ser considerado delito porque tampoco hay ninguna orden judicial ni ningún requerimiento ni ninguna sentencia directa al lehendakari solicitándole o prohibiéndole el reunirse con diferentes formaciones políticas o con representantes de diferentes sensibilidades políticas, en este caso, en concreto, con representantes de la izquierda abertzale", añadió.

"ESTUPOR Y ASOMBRO"

Además, aseguró que su sensación al tener que declarar ante el TSJPV ha sido de "estupor y de asombro", al observar "la contradicción y la falta de sintonía" que supone su comparecencia con "la sentencia del Tribunal Supremo rechazando la querella interpuesta por Manos Limpias" y con la petición de la propia Fiscalía para que se procediera al "sobreseimiento libre y el archivo inmediato" del procedimiento abierto contra el lehendakari.

Además, destacó las declaraciones en los últimos meses "de distintos vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), de su propio vicepresidente, Fernando Salinas, del magistrado del Supremo José Antonio Martín Pallín, y del ex fiscal jefe anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo".

"Todos ellos coinciden en la misma línea, esto es, que el diálogo difícilmente puede ser delito, en que no hay ninguna prohibición en concreto para practicar el diálogo. Y algunos, incluso, dicen que, si se llegase a la conclusión de que practicar el diálogo para resolver los conflictos es considerado delito, habría que revisar a fondo las leyes vigentes", explicó.

La portavoz del Gobierno vasco dijo ser consciente de que "en el mundo de la jurisprudencia no hay sentencias vinculantes, pero sí hay precedentes".

En este sentido, reiteró que "las actuaciones que sigue manteniendo el TSJPV sintonizan y casan mal" con las "distintas sentencias" como de la Audiencia Nacional o del Tribunal Supremo, con pronunciamientos de la Fiscalía General del Estado o "con las opiniones de distintos representantes del mundo judicial".

Por todo ello, Azkarate pidió, de nuevo, el sobreseimiento del procedimiento abierto contra el lehendakari, que "nunca debió empezar".