TOLEDO, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, anunció hoy que el Consejo de Gobierno ha aprobado un Anteproyecto de Ley para suprimir los impuestos de sucesiones y donaciones, que beneficiará a unos 60.000 declarantes de la Comunidad Autónoma, y cuya entrada en vigor se producirá a partir del 1 de enero de 2008.
En rueda de prensa, tras la reunión del Consejo de Gobierno, Barreda, acompañado por el vicepresidente primero, Fernando Lamata y la vicepresidenta segunda del Ejecutivo y consejera de Economía y Hacienda, María Luisa Araújo, explicó que estas nuevas medidas fiscales supondrán un ahorro para las familias castellano-manchegas cercano a los 50 millones de euros.
En concreto, el Anteproyecto de Ley prevé una deducción del 95 por ciento en las sucesiones 'mortis causa' entre cónyuges o entre padres e hijos; de las que se beneficiarán unos 50.000 declarantes, y que supondrá un ahorro de unos 40 millones de euros.
La misma deducción, del 95 por ciento, habrá en el impuesto de donaciones, a favor de los hijos y el cónyuge, sin límite de cantidad a deducir. De esta medida se beneficiarán aproximadamente unos 10.000 contribuyentes, suponiendo un ahorro total de nueve millones de euros.
Las personas con discapacidad contarán también en ambos supuestos con deducciones del 95 por ciento, compatibles entre sí, de tal forma que, juntando las dos, se beneficiarán de deducciones cercanas al 100 por cien, tal y como remató Barreda.
EFICIENCIA Y TRASPARENCIA.
El responsable de la Comunidad Autónoma agregó que entre los objetivos de estas nuevas medidas fiscales figura favorecer a las familias, facilitar la trasmisión de bienes y derechos para conseguir una mayor eficiencia económica y reducir las diferencias de tributación de los bienes transmitidos y favorecer la transparencia de las trasmisiones.
En este punto, reseñó que estas nuevas ventajas, con la que se cumple un compromiso adquirido durante la campaña electoral y en el Debate de Investidura, se suman a otras adoptadas con anterioridad por el Ejecutivo castellano-manchego como la reducción del IRPF y, en la supresión del impuesto de sucesiones para explotaciones agrarias.
Finalmente, y satisfecho por cumplir los compromisos adquiridos con la ciudadanía, precisó, a preguntas de los medios, que para poner en marcha estas nuevas deducciones se ha utilizado la fórmula del Anteproyecto de Ley, considerando que las medidas "tienen la importancia suficiente para merecer la singularización de una ley específica".
