PALMA DE MALLORCA 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El constructor Felipe Seguí, que intervino en las obras de ampliación de una vivienda ubicada en el Port d'Andratx para convertirla en un restaurante, propiedad del hermano del ex alcalde Eugenio Hidalgo, confirmó hoy haber tenido problemas para cobrar por los trabajos realizados en casa de Carlos Hidalgo, debido a que también había realizado reformas en casa del ex primer edil Y las relaciones entre ambos "no eran muy buenas".
Durante la segunda jornada del juicio que se celebra hasta mañana en la sección segunda de la Audiencia Provincial por la pieza 32 del caso Andratx, Seguí manifestó, en su comparecencia como testigo, que prestó servicio para Carlos Hidalgo a través de Promociones Llamp, dirigido a reformar una vivienda antigua y transformarla en restaurante, situada en un Área Natural de Especial Interés (ANEI).
No obstante, aseveró que, además de este trabajo, también llevó a cabo reformas tanto en la casa de Eugenio como en la de Carlos Hidalgo, en este caso como autónomo ya cuando Promociones Llamp había quebrado. Al detectar problemas en el cobro por parte de Carlos, se dirigió al ex alcalde para comentarle esta circunstancia y éste le respondió que "no tenía nada que ver" con su hermano.
Asimismo, reconoció que se le hizo un precio especial a Carlos por ser hermano del ex primer edil, pese a que finalmente "sólo me pagó una parte". "Y es que en ese momento ambos estaban muy unidos, pero no cuando trabajaba para Promociones Llamp, época en la que las relaciones entre los dos hermanos eran malas, por los comentarios que me llegaban", prosiguió.
Por último, reconoció que procedió al derribo de varias obras realizadas en el restaurante, exactamente "un añadido en un lateral, porque Carlos me llamó y me pidió que se lo tirara abajo". Por otro lado, negó haber estado presente cuando el celador Jaume Gibert acudió a inspeccionar la instalación.
Mientras tanto, Gibert, quien también compareció durante el juicio, negó que, antes de proceder a la inspección fuese informado de las denuncias interpuestas por la Conselleria de Medio Ambiente y el Consell de Mallorca a raíz de las obras ilegales cometidas. "No me enseñaron nada de esto", prosiguió el ex celador, quien llevó a cabo la inspección, según defendió, para comparar las obras realizadas con lo que permitía la licencia otorgada a Carlos Hidalgo.
Tal y como puntualizó, observó que en la parte superior del inmueble habían instalado un acristalamiento y posteriormente denunció las obras "extra" que se habían ejecutado. También hizo alusión al trato entre Hidalgo y Massot fuera del Ayuntamiento y aseveró que había "una relación de amistad".
Tras su declaración, le tocó el turno a un agente forestal de la Conselleria de Medio Ambiente, Jordi Monterde, quien afirmó que quería tener constancia de si la ampliación de la zona húmeda estaba contemplada en el proyecto bajo licencia. En este sentido, comentó que su interés era la ocupación del suelo forestal de esta zona aunque al dirigirse al Ayuntamiento para ello, "nadie me hizo mención a nada ni obtuve respuesta alguna".
CIERRE DEL PARKING EN SANT ELM
Para finalizar, Catalina Moyà, madre de la actual primera teniente de alcalde de Andratx por UM, Isabel Alemany, enfatizó que vio que "esto no era legal y lo denuncié", también debido a que Eugenio Hidalgo clausuró en agosto de 2006 un parking propiedad de la familia de Alemany, ubicado en Sant Elm y registrado a nombre de la propia Moyà. "Aunque yo de política nada", se encargó de aclarar.
Respecto a la vivienda ubicada en la zona ANEI del Port d'Andratx, apuntó que cuando interpuso su denuncia hizo referencia a una caseta -en alusión a la vivienda a partir de la que se contruyó el restaurante- "en la que vivía un hombre con su burro, aunque no tengo por qué acordarme cuándo se construyó el restaurante", remarcó.