VITORIA, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
El consejero vasco de Interior, Javier Balza, informó hoy de que la Ertzaintza, la Policía Nacional y la Guardia Civil "están compartiendo" la información sobre las evidencias y testimonios recogidos en el lugar del asesinato de Isaías Carrasco con el fin de detener a los responsables del atentado. Además, tras destacar que la coordinación con el Ministerio del Interior está en sus "mejores momentos", negó que haya "ningún problema" para ofrecer un servicio de escolta a todas las personas que lo necesiten y que lo deseen.
El responsable autonómico de Interior, tras participar frente a la Diputación de Vitoria en una concentración de condena por el asesinato del ex concejal del PSE en Mondragón (Guipúzcoa), explicó que la Ertzaintza ha recogido "todas las evidencias" existentes en el lugar del crimen y que éstas están siendo "compartidas directamente" con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FSE), puesto que la prioridad de todos estos cuerpos es detener a los autores del asesinato.
Balza expresó su satisfacción por el hecho de que la coordinación con el Ministerio del Interior atraviesa por sus "mejores momentos". Respecto a la posibilidad de modificar las medidas de seguridad de las personas amenazadas, tras el asesinato de una persona que ya no ocupaba cargo público alguno, defendió la "validez" del sistema empleado para analizar las necesidades de cobertura de este colectivo.
Según explicó, en el mecanismo destinado a analizar este tema participan la Policía autonómica, la Policía Nacional y la Guardia Civil, que se encargan de hacer "una evaluación de quién debe mantener el servicio de escoltas" y de otras cuestiones similares.
Balza recordó que en el caso de Carrasco, la propia víctima había expresado su intención de renunciar a este servicio, lo que atribuyó a que éste, tras abandonar la representación pública y pasar a trabajar en la empresa privada, podría considerar "un tanto absurdo" que un trabajador tuviera que ser escoltado.
El consejero lamentó que los terroristas se hayan "aprovechado de esa circunstancia" para "ir a buscar a la persona más débil y sin protección".
De todas formas, aseguró que "nadie que necesite" o que habiendo ocupado un cargo público, desee un servicio de protección "va a estar privado de escolta". "Vamos a dar cobertura total y no hay ningún problema para que nadie que lo necesite" disponga de la protección de un guardaespaldas, afirmó.