MADRID 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Nacional ha condenado al dirigente de la organización terrorista ETA José Javier Arizcuren Ruiz, alias 'Kantauri', a una pena de 30 años de prisión y 6.000 euros de multa por contribuir en 1995 a la creación del 'comando Araba' y prestar apoyo a sus integrantes, que tenían entre sus objetivos al entonces consejero de Interior del Gobierno vasco, Juan María Atutxa.
La Sección Tercera del tribunal, presidida por el magistrado Alfonso Guevara, condena a 'Kantauri' a diez años de cárcel por un delito de depósito de armas y municiones, a otros diez por tenencia de explosivos, a seis por falsificar placas de matrícula y a seis más por hacer lo mismo con documentos de identidad y permisos de conducir. No obstante, la sentencia especifica que se le aplicará el límite máximo de cumplimiento de 30 años establecido en el Código Penal.
Durante el juicio, el teniente fiscal, Jesús Santos, rebajó su petición de cárcel de 44 a 32 años al retirar el delito de integración en organización terrorista, por el que pedía 12 años de cárcel en su escrito provisional de acusación, ya que fue juzgado en Francia por el delito análogo de asociación de malhechores. Esta misma petición fue formulada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), que ejerció la acusación popular.
ATENTADO CONTRA ATUTXA
El tribunal considera probado que 'Kantauri' propuso la creación de un 'comando' que actuara en Vitoria (Álava) a Agustín Almaraz Larrañaga, 'Patxi', y Juan Ignacio Alonso Rubio, 'Iñaki', que durante su comparecencia como testigos en la vista aseguraron no recordar la relación que mantuvieron con el dirigente etarra.
Tras su entrevista con 'Kantauri', 'Patxi' e 'Iñaki' se trasladaron a Mondragón (Guipuzcoa), contactaron con la futura miembro del 'comando' Nerea Bengoa Ziarsolo y se entrevistaron con un enlace de la banda que les entregó una nota sobre el día y lugar para efectuar una entrega de armamentos y explosivos. Cuando fueron detenidos, el 26 de diciembre de 1995, poseían 173 kilos de amonal, dos pistolas y un subfusil.
El intento de asesinato de Atutxa no fue incluido en el procedimiento al no constar en el decreto de extradición expedido por las autoridades judiciales francesas. Al ser preguntado durante la vista si el 'comando' preparaba un atentado contra Atutxa, Alonso Rubio respondió con un lacónico "quizás sí".
El representante del Ministerio Público basó su acusación en la "declaración judicial paradigmática" que realizó Almaraz en la Audiencia Nacional, a la que acudió en compañía del abogado José María Matanzas, acusado en el macrosumario contra el entorno de ETA. En ese momento, según indicó, "detalló todo su historial delictivo y aseguró actuar siguiendo las instrucciones de 'Kantauri'".
Del mismo modo, citó las pruebas periciales incluidas en la causa, que ponían de manifiesto que el armamento y los explosivos hallados en el piso de Vitoria que ocupaba el 'comando' presentaban "un uso operativo correcto", según señaló uno de los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía llamados a declarar.