VITORIA, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
El consejero vasco de Justicia, Joseba Azkarraga, consideró hoy que la recusación por parte del pleno del Tribunal Constitucional del magistrado Pablo Pérez Temps, que impedirá a éste intervenir en la delibración sobre el recurso del PP contra el Estatuto de Cataluña, demuestra que "quien Gobierna en España no es el PSOE, sino el PP", del que afirmó que se ha "cobijado" en el Poder Judicial tras su derrota en las elecciones de 2004.
En una rueda de prensa celebrada en la sede del Gobierno vasco en Vitoria, el consejero manifestó que la decisión del Tribunal Constitucional, junto con la "polémica" generada por el encausamiento de Ibarretxe por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) y "otra serie de actuaciones" suponen "un cúmulo" de decisiones judiciales que indican que, "en algunos juzgados y tribunales, se está dando entrada a razones políticas".
Tras afirmar que esta situación es una "barbaridad", manifestó que el PP, tras su derrota en las elecciones generales de 2004, "se ha instalado y cobijado en un Poder Judicial que controla y que galvanizó durante la etapa de Aznar". En este sentido, manifestó que la decisión del Tribunal Constitucional evidencia "que quien gobierna en España no es el Partido Socialista, es el Partido Popular".
"Lo que ocurre en el Tribunal Constitucional es enormemente preocupante", apuntó, para añadir que "el cúmulo de despropósitos" que se están propiciando desde el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y desde el Tribunal Constitucional "están colocando al sistema de libertades al borde del precipicio".
"Es inaudito que actos y decisiones de este tipo de instituciones entren dentro de lo que es la competencia propia de los partidos y de los poderes ejecutivos. Es muy difícil mantener por más tiempo este tipo de situaciones", denunció.
"CAOS"
El consejero advirtió de que se está generando "una total desconfianza de los ciudadanos ante la Justicia" y de que "se corre peligro" de llegar a una democracia "con más agujeros que un colador".
Por este motivo, consideró que, "de una vez por todas, alguien tendrá que plantar cara ante este cúmulo de despropósitos". "Si desde la política no hacemos un esfuerzo por no politizar la Justicia, creo que nos estamos enfrentando al caos", subrayó, para añadir que "hay una responsabilidad importante desde el ámbito de la política para intentar delimitar los campos de cada uno, pero también la hay en el ámbito de la Justicia".