Batasuna.- PP lamenta el papel vergonzante del Gobierno y desea que se tomen las medidas para que el acto no se celebre

BILBAO 17 Ene. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del PP vasco, Leopoldo Barreda, lamentó hoy el "papel vergonzante" del Gobierno central y de la Fiscalía en relación al acto de Batasuna en el BEC y expresó su deseo de que se adopten todas las medidas necesarias para que éste no se celebre, después de la decisión adoptada por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska por la que amplía la suspensión de actividades de la formación abertzale y prohíbe su Congreso.

En declaraciones a Europa Press, Barreda manifestó que la resolución del magistrado está "acorde con el Estado de Derecho" y es apoyada por "la gran mayoría de los ciudadanos, de aquellos que creen que debe primar la legalidad sobre las pretensiones de los terroristas y que la seguridad jurídica es algo importante".

Además, lamentó "el papel completamente deslucido, a regañadientes, de la Fiscalía, del propio Gobierno, de instituciones que tenían la responsabilidad de haber tomado la iniciativa en este tema, que no han querido hacerlo y que han hecho un papel vergonzante, dando la impresión de que la actuación de grupos ilegales depende de criterios de oportunidad política y no de legalidad".

Por ello, consideró que debe "asegurarse" la ejecución de la resolución judicial, adoptándose todas las medidas necesarias para que no se celebre ese acto. "Hay que asegurarse de que se cumpla en su plenitud esta decisión, de que no haya ni Congreso ni sucedáneo de Congreso", dijo.

A su entender, también deben estar "muy bien identificados los responsables de cada actuación, los responsables de la convocatoria, de los alquileres del local, quienes se manifiesten ante la opinión pública manteniendo esa convocatoria, quienes se presten a ceder micrófonos y se deben tomar las medidas para que respondan de sus actos quienes burlen o contribuyan a burlar la legalidad por parte de ETA-Batasuna después de esta resolución judicial".

Para el dirigente popular, lo que está en juego es la "credibilidad del Estado de Derecho y las instituciones frente a un grupo terrorista" y, por tanto, "hay que responder con absoluta seriedad a los desafíos planteados tanto por ETA-Batasuna como por quienes, al parecer, no desean en ningún modo la derrota de los terroristas como son algunos portavoces de fuerzas supuestamente democráticas que están haciendo planteamientos casi inconcebibles en democracia".