MADRID, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
El diputado socialista en el Congreso José María Benegas es partidario de aplicar medidas que permitan "reducir" la práctica de prostitución, como la prohibición progresiva de esta actividad en las calles, el cobro de impuestos a los locales en los que se ejerza o la creación de brigadas policiales especializadas en la lucha contra las mafias.
En un articulo publicado en la revisa 'El Siglo', recogido por Europa Press, Benegas aboga por dejar a un lado el debate "maximalista entre prohibición o regularización" y por empezar a buscar soluciones "intermedias".
Desde su punto de vista, la prohibición total de la prostitución "sólo puede implantarse mediante una persecución sancionadora de la misma con derivaciones penales", una opción que acabaría convirtiendo al Estado "en un inquisidor sobre conductas que, en definitiva, son privadas".
"Si, además, la prohibición se implanta sin ninguna política de reinserción social, el primer efecto es la clandestinización de la prostitución y que las mafias mantengan una fuerte disciplina sobre las mujeres que esclavizan para no ser descubiertas, endureciendo sus tratos vejatorios a las mismas", advierte el veterano diputado socialista.
Por contra, argumenta que la regularización de los derechos y obligaciones tiene "un serio inconveniente en el terreno de los principios y valores" como es que el Estado "aparezca como el garante del ejercicio de la prostitución".
Por todo ello, se declara partidario de "afrontar el problema desde terrenos intermedios" y lanza algunas propuestas. Apuesta, por ejemplo, por una implantación "progresiva" de la "prohibición de la prostitución callejera" que debe realizarse mediante una "actuación disuasoria y correcta de las policías locales y no meramente represiva".
BRIGADAS ESPECIALIZADAS Y PROHIBICIÓN DE ANUNCIOS
Esto habría de acompañarse de una "persecución penal implacable de las mafias de proxenetas", mediante la aplicación del plan integral contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual y la puesta en marcha de "brigadas policiales especializadas en este ámbito".
Benegas plantea también la conveniencia de introducir un "control riguroso" de los locales en los que se practica la prostitución, que les exija "el pago de los pertinentes impuestos", que se prohíba la publicidad sexual "en los medios generalistas", que se aprueben programas de inserción social con fondos públicos para ayudar a las prostitutas que quieran dejar esa ocupación y que se financien acciones concretas para inducir a ese abandono.
