VITORIA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento vasco aprobó hoy, con el apoyo del PNV, EA, EB, EHAK y Aralar, una iniciativa que, aunque sin referirse de forma expresa a los últimos encarcelamientos de dirigentes de Batasuna, reclama la puesta en libertad de "aquellas personas que en el ejercicio de derechos básicos como el de reunión, han sido detenidas y encarceladas". El texto, rechazado por el PSE y el PP, se ratifica en la petición de la desaparición de la Audiencia Nacional y de la Ley de Partidos.
La propuesta fue aprobada en el pleno del Parlamento a raíz de una enmienda del tripartito y Aralar a un texto de EHAK en el que se denunciaba la operación policial contra la reunión de Batasuna en Segura (Gipuzkoa) y el registro de la sede de EHAK en Donosti del pasado 5 de octubre decretado por la Audiencia Nacional. La iniciativa del grupo de la izquierda abertzale no salió adelante al no concitar ningún otro apoyo entre las formaciones parlamentarias.
Todos los puntos del texto de PNV, EA, EB y Aralar fueron apoyados por EHAK, salvo el cuarto, en el que se abstuvo. En este apartado, se establece que "el respeto a las reglas del juego propias de un sistema democrático es un elemento esencial para alcanzar la paz y la normalización política".
Esta, a su vez, y según la propuesta, ha de estar basada "en la asunción del pluralismo político y su respeto, en la ampliación del consenso entre diferentes y sin ningún tipo de expresión de violencia, chantaje o extorsión". Al igual que EHAK, el PSE se abstuvo en este punto, mientras que el PP votó en contra.
La enmienda del tripartito y Aralar exige "el respeto al fuero parlamentario" y subraya que la Audiencia Nacional "no es competente a la hora de actuar sobre asuntos que afecten a personas electas que componen el Parlamento vasco". Además, en referencia a la investigación de la sede de EHAK a raíz de aquella misma operación, aunque sin mencionarla de forma directa, denuncia "la vulneración de la inviolabilidad parlamentaria al procederse al registro de despachos y oficinas de parlamentarios de esta Cámara".
La proposición también se ratifica en los acuerdos parlamentarios que solicitan la desaparición de la Audiencia Nacional y la derogación de la Ley de Partidos.
Aunque sin citar expresamente los últimos encarcelamientos de dirigentes de Batasuna, la iniciativa se refiere a este asunto al manifestar que "aquellas personas que en el ejercicio de derechos básicos como el de reunión han sido detenidas y encarceladas, deben recobrar la condición de libertad". En este mismo punto, se reitera la oposición de la Cámara a "procesos de ilegalización de organizaciones políticas".
"FALTA DE LEGITIMIDAD"
El portavoz parlamentario del PSE, José Antonio Pastor, criticó la "falta de legitimidad" de EHAK para presentar este tipo de iniciativas porque "reclama derechos que ellos son incapaces de reconocer a los demás". Además, censuró el contenido del texto original y de la enmienda del tripartito porque "desde un Parlamento no se puede cuestionar" la actuación del Poder Judicial "independiente" y enmarcado en "un Estado de Derecho garantista".
El parlamentario del PP Carlos Urquijo se refirió a las críticas al encarcelamiento de una parte de la Mesa Nacional de Batasuna para afirmar que ésta se debía haber hecho antes, ya que se trata de una formación ilegalizada desde 2003. Respecto a la propuesta del tripartito, consideró que es "un torpedo en la línea deflotación del Estado de Derecho" y aseguró que el registro de la sede de EHAK y la detención de la dirección de Batasuna se hizo con todas las garantías legales. Urquijo, además, acusó al PNV de haber culminado su proceso de "batasunización" para ocupar el espacio de la izquierda abertzale.
El portavoz parlamentario del PNV, Joseba Egibar, contrapusó la actuación del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, quien decretó el encarcelamiento de 17 miembros de Batasuna tras la operación de Segura, con su modo de actuar durante la tregua de ETA.
"Durante el proceso de paz tomó decisiones para proteger el diálogo", aseguró, para afirmar a continuación que "lo que no vale es aplicar una interpretación diferente del derecho de reunión a una misma persona en función de las circunstancias". En respuesta a las acusaciones de Urquijo, aseguro que el PNV "no tiene ninguna intención" de ocupar el sitio de Batasuna.
Desde EHAK, Nekane Erauskin respondió a las acusaciones del PP, asegurando que "no se puede culpar de nada a nuestro grupo, porque su labor es política".
Por parte de EA, Rafa Larreina también se refirió a la operación contra Batasuna y afirmó que "los derechos fundamentales no pueden estar al albur de la coyuntura política; no tiene sentido que a comienzos de año se puedan ajercer y que luego, por unas determindas circunstancias, no se pueda".
El portavoz de EB, Oskar Matute, consideró que actuaciones como el encarcelamiento de los dirigentes de Batasuna o el proceso contra el lehendakari por su reunión con esa formación son "una caza de brujas".
La parlamentaria de Aralar, Aintzane Ezenarro, destacó que su grupo siempre se mantendrá en contra de "tentaciones de nuevas ilegalizaciones de partidos".