Roberto Jiménez sustituirá a Fernando Puras como portavoz durante el debate de investidura
PAMPLONA, 7 Ago. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de PSN, Carlos Chivite, avisó a Miguel Sanz que no debe pensar que los socialistas le van a conceder un "cheque en blanco" para actuar como en la pasada legislatura y expresó su compromiso a inducir el cambio desde la oposición. Según dijo, el presidente deberá cambiar "de actitud y de políticas", no sólo hacia los socialistas, sino hacia todos los ciudadanos.
"Tendrá que acabar con esa estrategia de división y enfrentamiento que ha llevado a cabo en los últimos años y meses", comentó Chivite, quien señaló que el objetivo de los socialistas es lograr un cambio en el que se reconozca la "diversidad ideológica y pluralidad identitaria" de Navarra, para "hacer posible la convivencia en aras al progreso".
Chivite y Samuel Caro, parlamentario y secretario de Organización del PSN, trasladaron a la presidenta del Parlamento que su grupo se abstendrá en la segunda votación de investidura. Ayer, Miguel Sanz telefoneó a Chivite para conocer si finalmente el PSN acataba la decisión de Madrid.
En comparecencia ante los medios, Chivite insistió en que no hay "ningún acuerdo, ni pacto ni compromiso con UPN". "Que no piense que esto es un cheque en blanco. El sabrá cómo tiene que actuar", advirtió.
El secretario general también adelantó que PSN, al no poder ejecutar el cambio, lo inducirá desde la oposición, desde donde aceptará iniciativas "de unos y de otros", en función de las coincidencias con el programa electoral socialista. Según reseñó, el PSN tiene una posición "privilegiada" en el salón de plenos, ya que es un grupo decisorio.
PURAS Y ESCISIÓN
En cuanto a la dimisión de Puras, el secretario general comunicó que intentó evitarla, pero destacó que Puras aceptó seguir al frente de la secretaría de Política Institucional. "Es un valor político. Ha dimitido en su condición de referente electoral de candidato, pero no del partido ni de la Comisión Ejecutiva. Sigo contando con este valor inestimable", dijo. Chivite agradeció su "trabajo, mutua lealtad y confianza".
Aunque Samuel Caro era el portavoz adjunto parlamentario, finalmente Chivite ha optado por situar a Roberto Jiménez al frente de la portavocía que deja bacante Puras, al menos en el debate de investidura. Después, tendrá que ser ratificada por los órganos del partido. El secretario general ha preferido que Caro se "implique más" en la secretaría de Organización. De hecho, tiene que apaciguar los ánimos entre las bases socialistas.
Respecto al riesgo de escisión, garantizó que no lo ve "en el horizonte", ya que los militantes socialistas "sabrán entender que por encima de intereses coyunturales hay un proyecto político".
Ayer, 22 agrupaciones de la Ribera de Navarra pidieron al grupo parlamentario que desobedezca a Ferraz. Chivite afirmó entender su reacción, porque han sido "agredidos y acusados" durante meses y tenían ganas de cambio. "También en política hay que dar salida a los sentimientos y a las emociones", justificó.
Pero recalcó que lo hacen "desde la lealtad al Partido Socialista". Hizo constar que "otros quizá desde dentro del partido no lo hacen tanto", criticó.
Chivite aseguró que su "obligación" es encauzar la nave "para que nadie ni desde dentro ni desde fuera intente hundirla". Así, hizo un llamamiento a la "calma", entre otras cosas porque en el comité regional del 1 de septiembre, con presencia de Blanco, "todo el mundo podrá expresarse". Defendió que los socialistas deben ser "pragmáticos" para abordar las elecciones generales y las forales de 2011.
UPN
Miguel Sanz avanzó hoy que hará "guiños" durante su mandato a PSN. Al respecto, Chivite insistió en que el PSN tiene un proyecto "propio y diferenciado" y que podrá coincidir en unos casos cono unos y en otros, con otros. "No atenderemos guiños sino necesidades de los ciudadanos", comentó, y afirmó que una de las demandas del PSN es mejorar los servicios públicos. "Tenemos las manos libres. Nuestro proyecto político es nuestra hoja de ruta", prosiguió.
Por otro lado, ayer, Del Burgo amenazó con la posibilidad de convocar elecciones anticipadas en caso de que PSN bloquee las iniciativas de UPN-CDN. Al respecto, Chivite replicó que el Partido Socialista "no ha sido nunca un partido de bloqueo sino de estabilidad". Y añadió que es UPN el que tiene la responsabilidad de que ese bloqueo no se produzca.
"Quiero pensar que entramos en una nueva etapa y que eso sea el principio de un nuevo tiempo político para Navarra, donde lejos de la división y confrontación se apueste por la convivencia y se respeten los postulados y las iniciativas del resto de la oposición", proclamó Chivite, quien espera que UPN aparque la "apisonadora y los rodillos" que ha empleado durante la pasada legislatura. Insistió en que en Navarra "no sobra nadie" y que siempre que se rechace la violencia y se condene el terrorismo "hay espacio para el encuentro".
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