VALLADOLID, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia de Valladolid condenó a una pena de un año y medio de cárcel por un delito de daños a Raúl P.A, el hombre que fue juzgado por prender fuego por los cuatro costados a la casa de un vecino de Alcazarén al que venía reclamando el pago de una deuda de unos 700 euros.
En su fallo, la Sala absolvió al citado individuo tanto del delito de incendio, por el que se le pedía una pena de 15 años de prisión, con el argumento de que antes de prender fuego a la vivienda la recorrió y se aseguró de que no había nadie en su interior, como del delito de robo con fuerza y, sin embargo, acordó imponerle la citada pena de un año de prisión por un delito de daños y una multa de 450 euros por una falta de hurto, junto con la obligación de indemnizar al propietario de la casa con un total de 138.000 euros, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
Los hechos se remontan al día 11 de marzo de 2008, fecha en la que el ahora condenado, Raúl P.A, se personó en el número 39 de la calle Arrabal de Laguna de Duero donde Pedro C.S. se encontraba realizando un montaje eléctrico y le exigió que le abonara una deuda de 700 euros, amenazándole de que en caso contrario le quemaría la casa. "¡De la cárcel salgo, pero tú del hoyo si no me pagas!", dijo entonces el condenado a su deudor.
Nueve días después, el 19 de marzo, el acusado, en compañía de otros dos individuos, se presentó en Alcazarén y se dirigió a la casa de Pedro C.S, sita en la calle Camino de Megeces. Entró en el patio trasero y al encontrarse con un cuñado del propietario preguntó a éste de forma agresiva dónde se encontraba el morador, para luego marcharse tras ser informado de que no se encontraba en el lugar.
"SUPERARREPENTIDO"
Horas después, sobre las 17.00 horas, el procesado, en este caso solo, regresó y con el ánimo de cumplir su amenaza accedió al interior de la vivienda tras fracturar el cristal de una ventana, lo que le provocó un corte en una mano, y le prendió fuego por los cuatro costados, hecho que durante el juicio fue reconocido por Raúl P.A, quien se mostró "superarrepentido" de lo que calificó de un "error" cometido en parte debido a los problemas de alcoholismo que padecía y la falta de dinero.
Pese a ello, el imputado aplicó una llama sobre material combustible sólido y la aplicó en cuatro focos principales: la esquina noroeste del garaje, la terraza bajo cubierta, el armario empotrado de la zona del recibidor-pasillo y la cama de la habitación del matrimonio, utilizando en la zona de la terraza un acelerante y pastillas de encendido que se encontraban en la cochera.
A causa de tales hechos se produjeron importantes daños en la vivienda y el mobiliario, pericialmente tasados en 84.000 y 54.000 euros, respectivamente.
El autor del incendio fue detenido poco después y en su poder fue hallada una cámara fotográfica marca Panasonic procedente del inmueble siniestrado. Para probar que se trataba de la misma cámara se hicieron las investigaciones oportunas y al visionar las instantáneas aún guardadas en su memoria se pudo comprobar que las mismas recogían imágenes de los moradores de la casa y otros familiares.