BARCELONA 28 Sep. (EUROPA PRESS) -
La situación económica marcará el Debate de Política General que empieza mañana y que acabará el 1 de octubre, a la espera de la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut, que podría producirse en octubre.
Tanto el presidente de CiU, Artur Mas, como su socio y número dos de la federación, Josep Antoni Duran, ya han dejado claro en las últimas semanas que la crisis iba a ser la prioridad de CiU pese a la polémica sobre las consultas independentistas y el debate sobre la reacción ante una sentencia del TC adversa al Estatut.
Mas se ofrecerá como alternativa ante la crisis frente a un presidente de la Generalitat, José Montilla, que, a juicio de la federación, desaparece ante las dificultades. CiU rechazará la subida de impuestos y reclamará la supresión del de Sucesiones. También tendrá tiempo para instar al PSC a acordar un Pacto Nacional de Infraestructuras ambicioso, aunque también se referirá a la sentencia del TC.
De la misma forma, el PP catalán centrará el debate en la salida de la crisis, pues argumentan que es el asunto prioritario para los catalanes. De hecho, volverán a pedir un pleno monográfico para tratar la situación económica. Los populares presentarán propuestas de resolución basadas en el ámbito económico, social y fiscal para contrarrestar "la agonía y fracaso" de las políticas del presidente Montilla.
En declaraciones a Europa Press, el presidente de C's, Albert Rivera, consideró necesario poner sobre la mesa no sólo la crisis, sino también lo que consideró una grave crisis institucional, por la falta de confianza de los ciudadanos en un Govern dividido en asuntos como la consulta de Arenys y la necesidad de una ley electoral catalana.
EL TRIPARTITO HACE BALANCE
El viceprimer secretario y portavoz del PSC, Miquel Iceta, avanzó ayer que centrará su intervención en destacar la buena gestión del Govern, que puede exhibir una "brillante hoja de servicios", dijo.
El presidente de ERC, Joan Puigcercós, hará balance de los últimos años del Govern, y situará como objetivo para los próximos años avanzar en la profundización democrática, social, cultural y lingüística, con el impulso de la ley de consultas, la de acogida y la del cine. Con la crisis como eje central, también hará una referencia explícita al derecho a decidir.
ICV-EUiA destinará su intervención a hacer un análisis de la situación de crisis y a proponer las medidas necesarias para afrontarla, con instrumentos como los recursos que derivan del nuevo modelo de financiación.
Montilla abrirá mañana el debate a las 17 horas con una intervención sin límite de tiempo. El año pasado utilizó dos horas. El miércoles será el turno de los representantes de los seis grupos parlamentarios, por orden de mayor a menor representación. Cada grupo tendrá media hora, y Montilla podrá contestar durante el tiempo que desee. La réplica será de diez minutos, y, si el presidente vuelve a responder, tendrán cinco minutos más.
Por último, el jueves 1 de octubre la sesión se retomará a las 12 horas, con el debate y votación de las propuestas de resolución, que se podrán presentar entre las ocho y las nueve la mañana. Los grupos podrán presentar propuestas transaccionales entre las 9.30 y las 10.30 horas.
El Debate de Política General del año pasado estuvo marcado por el modelo de financiación, y tras negociaciones entre el tripartito y CiU, lograron pactar una resolución que reclamaba el rendimiento completo en 2009 de todos los impuestos estatales que el Estatut cede a la Generalitat según el Estatut, aunque no concretaba ninguna cifra. Las negociaciones para llegar a este acuerdo fueron al más alto nivel, ya que participaron en ellas el presidente Montilla y el líder de CiU, Artur Mas.