Presenta ocho reformas, entre ellas una rebaja fiscal, y le pide a Barreda que dimita y deje paso al PP si no se siente "con fuerzas"
TOLEDO, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
La presidenta regional del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, consideró hoy que el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, debería dar "un giro de 180 grados" en la política económica" porque los 'populares' no van a "seguir siendo cómplices de sus errores" mientras "se empeñan en seguir en la dirección equivocada". En este contexto, pidió a Barreda que suprima todas las delegaciones provinciales de la Junta y elimine el 50% de los cargos de confianza.
"No vamos a apoyar un plan que no contiene medidas eficaces o de rebaja fiscal", señaló De Cospedal en su primera intervención en el Debate sobre el Estado de la Región, aludiendo así al Pacto por Castilla-La Mancha --que sirvió a Barreda como eje de su discurso inicial-- y cuya fiabilidad y eficacia puso en duda la dirigente del Partido Popular, segura de que "ya hemos conocido muchos planes y muchos fotoplanes para creernos otro a pies juntillas".
El empleo, la economía y la gestión política del Ejecutivo autonómico en estos asuntos fueron dos de los "fracasos" aludidos por De Cospedal, quien preguntó qué ha sido de los 90.000 empleos que el presidente autonómico se comprometió a crear en febrero, teniendo en cuenta hasta 169.165 personas se encuentran actualmente en paro en esta región y que tres de cada dos parados no recibe ninguna ayuda.
"Lo verdaderamente eficaz del debate es que el Gobierno empezara a tomar medias para paliar el crecimiento del desempleo y para eso el PP sí quiere trabajar", dijo, y demandó a Barrreda que "si no se siente con fuerzas para sacar adelante un proyecto esperanzador" en la región "lo que tendría que hacer es dimitir".
No obstante, De Cospedal recordó a todos los castellano-manchegos que "de la crisis vamos a salir y pueden tener esperanza porque hay alternativa y la alternativa a su gobierno se llama Partido Popular y yo me siendo muy honrada de liderar la alternativa a ustedes".
En su disertación, declaró que cerca de 900.000 castellano-manchegos cobran menos de 1.100 euros brutos al mes y que hasta 15.634 autónomos han cerrado sus puertas en los primeros siete meses del año, lo que le llevó a afirmar que en esta región "de primera división no tenemos un gobierno de primera división" pues si así fuera, el Ejecutivo "ya estaría tomando medidas para que en Castilla-La Mancha no tuviéramos que sufrir ser una de las regiones de España donde más se ha incrementado el número de desempleados".
Por otra parte, rechazó que los socialistas quieran subir los impuestos y demandó a Barreda que pida a sus diputados y senadores en las Cortes generales que cuando el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, presente una subida de impuestos "voten en contra de esa subida", pues, a su juicio, ese es "uno de los mayores errores que se pueden hacer".
Continuó lamentando De Cospedal el "fracaso tras fracaso" cosechado por el responsable del Gobierno autonómico tras 26 años de responsabilidad regional y cinco como presidente de la Junta, entre los que citó el mundo rural, la agricultura y la ganadería, el "haberse apropiado en los anuncios" de la OCM del vino, la educación la sanidad --recordó que el consejero de Salud y Bienestar Social, Fernando Lamata, aún no ha explicado en las Cortes nada sobre la gripe A-- o el Estatuto de Autonomía.
De este último, destacó el hecho de que el Ejecutivo castellano-manchego "no sea capaz de sacar adelante el Estatuto porque no cuentan ni siquiera con el apoyo de sus compañeros del PSOE" y "de mala manera se puede defender a nuestro Estatuto", advirtió De Cospedal, cuando algunos miembros del Gobierno central han hablado de él diciendo que "era un rollo".
En este contexto, aludió al Plan Hidrológico Nacional, considerando que si ahora no se puede aplicar es "seguramente porque los pactos de Zapatero con el tripartito catalán para mantenerse en el poder lo hacen imposible y no saben cómo salir de esa".
EL ESCÁNDALO NACIONAL
La presidenta regional del PP se refirió en otro momento de su intervención a la intervención de Caja Castilla La Mancha (CCM) por el Banco de España, que definió como un "escándalo nacional" y una "vergüenza" para toda la Comunidad Autónoma, por culpa de la falta de responsabilidad del Ejecutivo regional y el incumplimiento por parte de Barreda de la ley de cajas, mientras "sólo decían que la situación de la caja era excelente".
De Cospedal reseñó cómo los socialistas votaron en contra de la creación de una comisión de investigación en el seno de CCM y se preguntó si José María Barreda "está en disposición de contestarnos o si va a aceptar hoy una comisión de investigación". Asimismo, anunció que el PP va a hacer "todo lo que tenga que hacer para garantizar que CCM se quede en nuestra tierra y la Obra Social también".
Por último, aludió la responsable autonómica del PP a la Ley de Garantías en el Acceso a la Vivienda anunciada por Barreda "por cuarta vez"; al "paradigma de urbanismo salvaje" que la Junta ha permitido en Seseña (Toledo), y a la modificación de la LOTAU en relación al aeropuerto de Ciudad Real, preguntándose por qué el PSOE ha tenido "tanto interés y tantas prisas" en modificar una ley que ha permitido la venta de terrenos con una gran diferencia de precios, y que calificó como un "pelotazo urbanístico" y una "golfería legislativa".
OCHO GRANDES REFORMAS
Como colofón a su primera intervención, y tras destacar cómo los castellano-manchegos "se sienten traicionados" por cómo se ha gestionado la nueva financiación autonómica, María Dolores de Cospedal presentó un "nuevo proyecto para Castilla-La Mancha" compuesto por ocho grandes reformas "pero de verdad, sin insultos, tonterías o cotilleos".
Entre ellos, citó una rebaja fiscal que incluya la reforma del impuesto de sucesiones y donaciones, reforma en el IRPF en beneficio de los desempleados y la reforma de transmisiones patrimoniales, y el apoyo a los autónomos con reformas legislativas como una ley para la conservación y consolidación de este sector que incluya medidas como la de tributar de acuerdo al dinero recibido o ingresado.
También ofreció una reforma para revitalizar la agricultura y la ganadería; facilitar la renegociación de créditos, y agilizar el pago de las ayudas prevista dentro de este sector; medidas de apoyo de fomento a la igualdad de la mujer y la modernización de las pymes; e incluso la supresión de todas las delegaciones provinciales de las Consejerías de la Junta, de todos los puestos de delegados provinciales y del 50 por ciento de cargos de confianza designados en la Junta pero "no para que vuelvan a recolocar a todos los cesados", como sucedió, según afirmó, tras el último cambio de Gobierno.
