ALCOBENDAS, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
La dirección del Colegio Suizo de Madrid, en Alcobendas, negó hoy el presunto acoso escolar sufrido durante dos años por un alumno de 10 años, que fue grabado el 26 junio de 2006 por sus compañeros de clase durante el recreo cuando le propinaban con la mano y con un estuche blando hasta 21 golpes en la cabeza, la nuca, las piernas y la espalda.
Los responsables del Colegio y el entonces director, Rene Portenier, se sentaron hoy en el banquillo de los acusados en el juicio de faltas, a puerta cerrada, que celebró el Juzgado de Instrucción número 1 de Alcobendas contra ellos como responsables civiles de los hechos.
A la salida de los Juzgados, el padre del niño agredido, Fernando Sacristán, señaló a los periodistas que tanto los responsables del centro como el que fuera su director "lo único que hicieron --en la vista -- fue mentir y negar los hechos". Además, añadió que incluso negaron la existencia de un informe del Defensor del Menor que da cuenta del acoso sufrido por su hijo, Miguel.
En el vídeo estaban implicados cinco alumnos, cuatro niños y una niña, del centro, pero al ser menores de edad la Fiscalía archivó el caso al no poder imputarles hechos delictivos. Por eso, Sacristán decidió denunciar a la dirección del centro por "tratar de ocultar los hechos" y sacar el caso a la luz. Ahora, solicita una indemnización de 30.000 euros por los daños morales sufridos por su hijo.
"SENTENCIA EJEMPLAR"
Además de las imágenes del vídeo, a Sacristán le dan la razón el informe del Defensor del Menor y el de la psicóloga que trató a Miguel después de abandonar el centro. Pero, según se quejó, ninguna de estas pruebas se tuvieron en cuenta en la vista.
Por esta razón, el padre del menor solicitó a la jueza Carolina García Durruf que tome declaración a la psicóloga, a quien se le denegó esta mañana la entrada al juicio, y al menor, que durante los meses posteriores a los hechos tuvo que recibir asistencia psicológica.
Gracias al apoyo de su familia, Miguel hoy está recuperado y vuelve a asistir a clase con tranquilidad en el Colegio Valdefuentes, en el barrio de Sanchinarro. Por el contrario, su padre hizo hincapié en que hay menores que quedan afectados y trajo a colación el caso de Jokin, el estudiante de 14 años que se suicidó después de sufrir durante un año el maltrato de sus compañeros del Instituto Talaia de Hondarribia, en Guipúzcoa.
Por eso, Sacristán se mostró convencido de que la titular del juzgado dictará "una sentencia ejemplar" que condene al Colegio y a su director, con la finalidad de que "en el próximo caso de acoso escolar que haya en España el Colegio se ponga las pilas".
Recordó que el informe Cisneros sobre acoso escolar asegura que el 60 por ciento de los menores que ejercen este tipo de abusos se convierten en delincuentes cuando tienen 18 años. "Esto es responsabilidad de los centros educativos. Los colegios tienen la obligación de guardia y custodia de los alumnos", recalcó.
Respecto a la actuación del centro, criticó que la dirección se limite a tachar la denuncia de "un montaje" y "un circo mediático". Al término de la vista oral, Rene Portenier y su abogado se negaron a contestar a las preguntas de los medios. "Nosotros no participamos en este circo", espetó el letrado de Portenier.
MÁS CASOS
El caso de este menor no es el único que se produce por presunto acoso escolar en el Centro Suizo. Unos días después de que los padres del niño hicieran públicos los hechos, la madre de una adolescente de 15 años denunció unos hechos similares e interpuso una demanda civil contra el centro por daños y perjuicios a la menor.
Según la madre, su hija estuvo cinco años sometida también a los continuos "insultos" e "intimidaciones" de algunas de sus compañeras. Entonces denunció que el Colegio Suizo no sólo no tomó medidas disciplinarias, sino que hizo caso omiso de todos sus esfuerzos por concertar un encuentro con los padres de las compañeras de su hija.