Los dos acusados de dar muerte a un bebé de seis meses hallado en Fortuna se culpan mutuamente de los hechos

Europa Press Nacional
Actualizado: lunes, 26 marzo 2007 17:02

MURCIA 26 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los dos acusados de dar muerte en el año 2000 a un bebé de seis meses y de la posterior ocultación del cadáver, hallado en 2005 en una cueva de Fortuna, se culparon hoy mutuamente de lo ocurrido durante la primera sesión del juicio que se celebró en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Murcia.

El cadáver fue hallado envuelto en plásticos en el interior de una cueva, en el paraje conocido como 'Las Casicas', en el municipio de Fortuna, por unos espeólogos. Presentaba un estado muy avanzado de descomposición y tenía una esclava con el nombre del bebé y la fecha de nacimiento.

La primera interrogada durante la sesión fue Francisca María P.C, madre del bebé. Esta declaró durante el juicio que nunca denunció la desaparición de su hijo ante la Policía porque tenía miedo a su ex pareja sentimental, segundo acusado por la muerte del pequeño, Salvador C.S, ya que este la tenía "amenazada de muerte", según ella misma relató.

"Me iba a matar y a cortar el cuello", agregó Francisca, la cual ya le había puesto a Salvador varias denuncias por malos tratos, que algunas de ellas las había retirado. Por este motivo, según la acusada, cuando le preguntaban por el paradero del pequeño ella decía que "está con sus padrinos".

Por su parte, y al respecto de lo que declaró Francisca, Salvador explicó que ella le había visitado en varias ocasiones a la prisión, por lo que se preguntó que "si me tiene miedo por qué viene a verme". "Además, me recargaba la tarjeta del móvil para que la llamara", manifestó.

Según el fiscal, Rafael Pita, la acusada aseguró en diversas ocasiones que el bebé estaba en diferentes lugares a cargo de sus padrinos lo que "dificultó la tarea de encontrarlo".

Además, el fiscal indicó, durante la vista, que "el teléfono de Francisca estuvo pinchado por la Policía para poder saber con quién y dónde se encontraba el niño".

Asimismo, Pita informó en el juicio que los Servicios Sociales le iban a retirar la custodia del bebé a Francisca ya que "no lo cuidaba como debía", mientras ella esta viviendo en las Torres de Cotillas con Salvador.

Por su parte, Francisca afirmó que el día de la desaparición de su hijo, fecha que no recuerda con "exactitud", "dos hombres de etnia gitana me obligaron a meterme en un coche por la fuerza, mientras me pegaban y yo gritaba, y me llevaron a un club, donde estaba obligada a prostituirme", mientras su hijo se quedó con su ex pareja.

También explicó que en el citado club estuvo durante dos ó tres meses hasta que "pude escapar y regresar a buscar a mi hijo, pero no estaba con Salvador". Mientras estuvo en el club "no pude avisar ni pedir ayuda", dijo Francisca.

REGRESO DE FRANCISCA A POR SU HIJO

Después de regresar del club de alterne, Francisca continuó viviendo con Salvador, con el cual tuvo un hijo que actualmente se encuentra bajo la custodia de los Servicios Sociales. En este sentido, indicó "que cuando vivía con él cada vez que le preguntaba por mi hijo me pegaba". "Nunca había ejercido la prostitución hasta que estuve con Salvador, que me obligaba", apostilló la acusada.

Por su parte, la ex pareja de Francisca, señaló que "acogí a Francisca en mi casa porque me dijo que tenía problemas con su padre, que le pegaba y que la había violado y el pequeño, que falleció, era fruto de ese hecho, por lo que estuvo viviendo unos cuarenta días en mi casa pero no era mi pareja en ese momento".

"Yo iba a trabajar todos los días y no tocaba al niño ni para cambiarle los pañales", destacó el acusado que actualmente cumple una condena de 10 años por otro delito.

Además, según Salvador "un día desapareció de casa ella y el niño. Me fui a trabajar y cuando volví no estaban; como no tenía con ellos ninguna relación familiar no denuncié su desaparición". "Unas vecinas me dijeron que la habían visto entrar en un coche blanco con una mujer, un hombre y el bebé", agregó.

"Para Francisca la prostitución es un 'hobby'", aseguró Salvador, quien la denuncio posteriormente, porque "dejaba abandonado en bares a mi hijo mientras yo estaba cumpliendo condena, por lo que quería quitarle a mi hijo y ahora él está mejor", expresó.

Igualmente, Salvador admitió que llamó a Francisca y le dijo que "o le ingresaba dinero o la denunciaba porque estaba dejando a su hijo por ahí". Francisca admitió haberle metido dinero en varias ocasiones "por miedo". Por otras parte, Salvador admitió conocer "bien" la zona y la cueva donde se halló el cadáver, ya que "he vivido allí" (en la localidad).

Con las declaraciones de los acusados concluyó la primera sesión del juicio, que se reanudará mañana a partir de las 10.30 horas.

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