ERC buscará esta semana apoyo de otros grupos para pedir a Bono que recupere un uso limitado del catalán en el Congreso

MADRID 8 Mar. (EUROPA PRESS) -

Esquerra Republicana quiere que el Congreso de los Diputados recupere la fórmula que se aplicó durante parte de la anterior legislatura y que permitía a los parlamentarios utilizar las lenguas cooficiales para introducir sus intervenciones, siempre que estas breves alocuciones fueran seguidas de la correspondiente traducción. Con el objetivo de retomar ese uso, el portavoz de ERC, Joan Ridao, va a abrir esta semana una ronda de contactos con el resto de grupos parlamentarios.

De esta forma, Ridao pondrá en práctica la estrategia que ya anunció hace dos semanas por carta a sus homólogos de otros grupos, tras constatar que el presidente del Congreso, José Bono, no tiene intención de reabrir el debate sobre el uso del catalán, el gallego y el euskera en la Cámara si la iniciativa no parte de los partidos.

Según informaron a Europa Press en fuentes de ERC, durante sus reuniones Ridao intentará convencer a los demás portavoces para que todos juntos reclamen a Bono la recuperación de lo que se bautizó como 'fórmula Marín', en referencia al socialista Manuel Marín, que la puso en práctica durante su Presidencia.

La idea de los independentistas catalanes es que todos los portavoces firmen un documento conjunto en el que se reclame formalmente a Bono que permita el uso breve y siempre traducido de las lenguas cooficiales a los diputados.

FUNCIONÓ VARIOS MESES

Marín aplicó este método durante varios meses tras la ofensiva emprendida por ERC en favor del uso del catalán y mientras se negociaba la reforma del Reglamento del Congreso. Esa modificación reglamentaria finalmente no vio la luz, entre otras cuestiones por el desacuerdo en torno al uso de las lenguas.

Los grupos nacionalistas propusieron entonces la posibilidad de que este asunto quedase fuera del Reglamento y se incluyera en una especie de anexo al mismo en el que se recogieran los usos y costumbres parlamentarios, pero sin valor normativo. Pero la idea no tuvo buena acogida y el rechazo frontal del PP a regular el uso del catalán, el gallego y el euskera, hizo que todo quedase en agua de borrajas.

Una vez iniciada esta legislatura y tras comprobar que no hay visos de reabrir la reforma del Reglamento, Ridao ha optado por recabar apoyos en los demás grupos para poder recuperar, al menos, la fórmula Marín, pese a que ésta no colma las reivindicaciones de los republicanos.

Ridao da por hecho que las formaciones nacionalistas respaldarán su iniciativa. Sin embargo, es previsible que el PP mantenga su rechazo y no parece que la actual dirección del Grupo Socialista esté por la labor de volver a tratar el asunto del uso de las lenguas. En función del resultado de sus reuniones, Ridao planeará su próximo movimiento.

Poco después de que Ridao empezase a diseñar esta estrategia, la Junta de Portavoces acordó solicitar un informe jurídico para buscar la forma de que el Congreso pueda tener actividad ordinaria en los meses de julio y enero, lo que llevó a algunos grupos a hablar de nuevo de la reforma del Reglamento. Ante esta posibilidad, ERC ya avisó de que si vuelve a abrirse este melón, ellos lo aprovecharán para plantear el tema de las lenguas.