MADRID, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
El fiscal del Tribunal Supremo ha solicitado este jueves la confirmación de la sentencia dictada el pasado mes de febrero por la Audiencia Nacional que condenó a 15 años de prisión al miembro de ETA Aitor Cotano por la colocación en la Nochebuena de 2007 de un artefacto explosivo en la casa del pueblo del Partido Socialista de Euskadi en la localidad de Balmaseda (Vizcaya).
El ponente de la sentencia que dicte el alto tribunal sobre este asunto será el magistrado José Manuel Maza, han informado fuentes de este órgano.
Durante su intervención en la vista por este asunto celebrada hoy ante la Sala de lo Penal del alto tribunal, el representante del Ministerio Público ha impugnado los dos motivos de casación alegados por la defensa de Cotano, que ha ejercido la letrada Jone Goiricelaia.
La abogada alegó que se había vulnerado el derecho de su cliente a la integridad física y moral por haber sido objeto de presiones durante su detención policial, que fueron denunciadas ante un juez de Madrid que las admitió a trámite. Por ello, Goiricelaia ha defendido que las pruebas en las que se fundamentó la sentencia de la Audiencia Nacional no son válidas porque no se obtuvieron con todas las garantías.
A este respecto, el fiscal ha recordado que hay que tener en cuenta que Cotano no denunció la supuestas torturas hasta cuatro meses después de producirse la detención, y ha añadido que el Juzgado al que correspondió investigarlas terminó archivando las actuaciones.
El tribunal de la Audiencia Nacional que juzgó estos hechos, presidido por Javier Gómez Bermúdez, consideró a Cotano culpable de un delito de estragos terroristas. El atentado fue avisado a través de una llamada al Centro de Coordinación de Emergencias del País Vasco en la que se advertía de la colocación de una bomba en la sede del partido socialista por parte de ETA.
La sentencia de la Sección Primera de lo Penal de la Audiencia explicaba que ésta comunicación provocó confusión en los efectivos de la Ertzaintza, que acordonaron en un principio la sede social de la formación y no la casa del pueblo, donde se encontraba realmente el artefacto.
La explosión causó un enorme cráter y provocó la caída de tabiques, la rotura de ventanas y balcones de las viviendas adyacentes, destrozos en el interior del bar y viviendas colindantes y la completa destrucción del almacén, con "evidente peligro" para las personas que se encontraban en el local o las viviendas adyacentes.
La resolución agregaba que Cotano reconoció en sus declaraciones policiales ser responsable de la acción., aunque durante el juicio celebrado en la Audiencia Nacional achacó su confesión a los malos tratos recibidos.
Señalaba también la Audiencia Nacional que en un zulo señalado por el acusado, situado en una casa en ruinas de la localidad de Getxo (Vizcaya) fueron localizados componentes idénticos a los que formaban el artefacto de Balmaseda.
