La etarra acusada de complicidad en el atentado en Girona en el que murió un mosso se enfrenta a la cadena perpetua

Actualizado: jueves, 9 octubre 2008 22:21


PARIS, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -

La etarra de nacionalidad francesa Laurence Beyrie, juzgada en el Tribunal de Criminal de París por complicidad en el atentado que costó la vida al agente de los Mossos d'Escuadra en Roses (Girona) Santos Santamaría en 2001, ha escuchado hoy en la apertura de la vista los cargos que pesan en su contra y que pueden conllevar una condena a cadena perpetua, según le ha comunicado la presidenta del Tribunal, Nadia Aijan.

Además de la acusación por complicidad en un acto de degradación de bienes que conllevó la muerte del agente, Beyrie está acusada de receptación del Ford Escort robado y cargado de explosivos que se utilizó en el atentado y de infringir la legislación francesa sobre explosivos en relación con una empresa terrorista.

Tras la lectura del sumario especificando los cargos, la presidenta del Tribunal le preguntó a la acusada su posición sobre la actividad de la banda terrorista ETA, a lo que Beyrie respondió negando en primer lugar su implicación en el atentado de Rosas alegando que las confesiones de Eider Pérez Aristizábal y Aitor Olaizola Baseta, los dos condenados en España por la colocación del coche-bomba, que dijeron identificarla como la persona que trasladó el vehículo desde Francia se hicieron "bajo tortura".

No obstante, reconoció su "compromiso" con la organización terrorista y la "violencia" practicada por ETA pero dijo que no se "entra en ETA por placer" sino porque en el País Vasco hay un "conflicto con el Estado español y francés" y que las reivindicaciones políticas no se pueden conseguir a través de los partidos políticos que son "ilegalizados". "La situación es tal que el conflicto en el País vasco es armado", agregó.

Beyrie ya fue condenada en febrero de 2007 a diez años de reclusión por asociación de malhechores con fines terroristas.

La presunta miembro de ETA fue detenida el 12 de diciembre de 2001 en la localidad gala de Auch, junto con otros tres terroristas.

En relación con ese atentado fueron detenidos otros dos etarras, Eider Pérez Aristizabal, arrestada en Rentería, y Aitor Olaizola Baseta, en Irún. Los dos formaban parte del "comando Sugoi" y fueron acusados de participar en el atentado contra el Hotel Montecarlo de Rosas (Girona) en el que resultó muerto Santos Santamaría.

Tras recoger el vehículo en Perpignan (Francia), cargado con 90 kilos de explosivos, fue conducido por Eider Pérez, mientras que Aitor Olaizola realizó las labores de lanzadera. Posteriormente lo aparcaron ante el hotel y activaron sus dispositivos para su explosión a las 23.00 horas.

La Policía española sospechaba que Beyrie, detenida junto al considerado jefe de cursillos de ETA, Juan Ramón Carasatorre, y José Ramón Lete, y una ciudadana francesa, podría haber trasladado desde Pau el coche bomba.

Según las investigaciones, Beyrie alquiló el piso de Toulouse registrado en la operación que supuso el hallazgo de un polvorín de ETA en Pau con más de una tonelada de explosivos, en el que aparecieron datos sobre el referido coche bomba, así como matrículas para doblar y listados de objetivos terroristas.

Las investigaciones apuntan que viajó en varias ocasiones a Madrid para supervisar la campaña del comando que actuaba en la capital de España e indicarle donde debían recoger el material por lo que tendría un alto grado de responsabilidad en el aparato logístico-militar de la banda.