Un experto invitado al Congreso por IU irrita a PP, PSOE y CiU con sus críticas a los partidos y su financiación

Actualizado: lunes, 28 abril 2014 15:20

Agradece haber sido citado para denunciar en la Cámara la corrupción: "Si lo hiciera fuera me podría costar hasta 600.000 euros"

MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

El analista económico y coautor del libro '¿Qué hacemos con la financiación de los partidos?', Miguel Ongil, ha generado este este lunes malestar en el PP, el PSOE y CiU en el Congreso por cuestionar el papel de los legisladores, por sus críticas a "cierta" clase de políticos y por denunciar los 21 "puntos negros" que, a su juicio, contiene la ley que promueve el Gobierno para el control de la financiación de los partidos.

Ongil ha sido invitado por el grupo parlamentario de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) a la Comisión Constitucional de la Cámara Baja, que este lunes ha concluido con el desfile de expertos que están planteando sus medidas anticorrupción y en pro de la regeneración democrática.

El compareciente, miembro del colectivo "Cuentas Claras", ha comenzado su intervención dando las gracias a sus señorías por haber sido citado a la mencionada comisión parlamentaria, pese a haber lamentado que sólo se haya llamado a 13 expertos, y por que se le permitiera "denunciar" la corrupción dentro del Congreso. "Si lo hiciera fuera me podría costar hasta 600.000 euros", ha llegado a decir.

Ongil, que trasladó a los diputados sus propuestas para atajar la corrupción y no los "insultos" y "palabras gruesas" que les suelen dedicar los ciudadanos, ha puesto de relieve los 21 "puntos negros" que contempla, a su juicio, la Ley de Financiación de Partidos del Gobierno.

En concreto, ha criticado que siga pudiendo donar "sin límite" bienes inmuebles, que los partidos puedan realizar operaciones de inversiones pese a tener prohibida las actividades mercantiles o que se 'venda' que se dará publicidad a las donaciones.

LEGISLAN SIENDO OBJETO DE LEGISLACIÓN

Además, cree una "tomadura de pelo" el sistema de infracciones que recoge el proyecto del Ejecutivo, que se plantee como un impulso a la transparencia que los tesoreros de los partidos tengan que rendir cuentas ante al Parlamento "y no ante sus militantes", que no se limite el endeudamiento de los partidos o que la democracia interna no esté "en ninguna parte", lo que trae consigo estructuras "clientelares".

Singularmente, el analista residente en Bruselas ha criticado que los parlamentarios legislen sobre algo sobre lo que son "objeto de legislación", como son los partidos políticos que, en su opinión, se han convertido en una especia de "cártel".

Entre sus críticas también ha mencionado la falta de participación de los ciudadanos en la vida de los partidos, las "barreras" de la LOREG a la entrada de nuevos partidos, la ausencia de sanciones por parte del Tribunal de Cuentas a las formaciones incumplidoras, la falta de independencia de éste, así como de otras instituciones de la justicia, la proliferación de indultos a corruptos o la existencia de la figura del aforamiento.

Frente a esta situación, Ongil ha subrayado que "sólo quedan las manifestaciones" y ha avisado que los ciudadanos seguirán saliendo a la calle pese a que a algunos les "multen, les "peguen" o les "criminalicen".

La intervención de este experto ha molestado tanto a PP, a PSOE como a CiU, quienes no han dudado en censurar algunas de sus afirmaciones y de sus aportaciones, que la ponente de los nacionalistas catalanes en la Comisión Constitucional, Montserrat Surroca, ha llegado a tachar de "provocativas".

A su juicio, la comparecencia de este experto ha estado cargada de "muchos tópicos" y de "algunos" aspectos que, según ha dicho, hacen más referencia a la percepción generalizada que tiene la ciudadanía la clase política y su relación con la corrupción que a los datos "reales".

LOS DIPUTADOS SÍ ESTÁN "TESTADOS" COMO REPRESENTANTES

Desde el PSOE, el diputado Ignacio Sánchez Amor ha replicado en concreto a Ongil sus críticas al papel de los legisladores. Así, ha denostado que el experto haya apuntado al Congreso como el lugar donde residen "todos los males" y que haya puesto en cuestión que los parlamentarios legislen sobre cuestiones que le afectan, en referencia a los partidos políticos.

Además, el parlamentario extremeño le ha querido dejar claro que los diputados están "testados" como representantes de la sociedad frente a quienes se creen que la representan a través de una página web.

En esta misma línea, el representante del PP, Pedro Gómez de la Serna, ha echado en cara a Ongil "la sonrisa complaciente" que ha dibujado su cara cuando ha señalado que no iba a trasladar a los diputados los "insultos" que les profieren los ciudadanos y ha apuntado que los parlamentarios están acostumbrado a "respetar" a los comparecientes en el Congreso.

En este sentido, el diputado 'popular' se ha mostrado partidario de huir de "los cazadores de brujas profesionales" que, en su opinión, sólo tratan de "incendiar" a la sociedad. Además, ha cuestionado algunas de las críticas al sistema de financiación de partidos y a la reforma que plantea el Gobierno por ser inciertas y ha admitido, con cierta sorna, tener "un poco de miedo" cuando Ongil ha hablado del "cártel de los partidos" y ha criticado que haya echado por tierra el papel legislador del Congreso.

LES RECOMIENDA SU LIBRO

Frente a todas estas críticas, el experto ha lamentado que se le haya atacado acusándole de hacer un discurso con "una retórica populista" y de haber hecho afirmaciones "falsas", y ha seguido defendiendo el sistema de "cártel de los partidos" remitiéndoles incluso a sus señorías lecturas académicas que hay en torno a esta cuestión y dejando claro que no es quiera acabar con la actual clase política sino con "cierta clase de políticos"

Y ante las dudas que algunos de los diputados han expresado respecto de sus propuestas frente a la corrupción, Ongil les ha ofrecido el libro '¿Qué hacemos con la financiación de los partidos?', del que es coautor, y en las que defiende que la financiación pública actual de las formaciones políticas es "excesiva --más de 8 euros por elector frente a los 1,67 en Francia--, excluyente --no otorga ayudas a quienes no consigan escaño--, opaca --así lo asegura el Tribunal de Cuentas-- y, además, fomenta el bipartidismo".

Tras reiterar algunas de sus medidas anticorrupción planteadas en su intervención inicial, Ongil ha advertido de que los ciudadanos no tienen intención de "esperar" a que sus políticos reaccionen ante la actual situación del país y que continuarán participando en plataformas de control ciudadano y político para tratar de cambiar las cosas.

Leer más acerca de: