BARCELONA 28 May. (EUROPA PRESS) -
El fiscal Gerardo Cavero ha afirmado este martes en el juicio contra los Casuals que no descarta que el altercado de este lunes entre los Mossos d'Esquadra y los miembros de la facción más radical de los Boixos Nois haya sido "por encargo".
El fiscal, que en sus conclusiones finales ha defendido la existencia de una asociación ilícita criminal, ha afirmado que no descarta que la tangana haya podido ser premeditada, aunque ha añadido que, de momento, el asunto está subjúdice: "Desde Fiscalía no descartamos esta y muchas otras posibilidades".
También ha solicitado al tribunal que se tenga en cuenta la actuación de los acusados durante estos últimos meses y que este comportamiento "no pase desapercibido", pues se ha repetido en distintos niveles en sesiones anteriores.
"Sus señorías no pueden quedar al margen de estos hechos", y ha afirmado que la cohesión, la hermandad y la relación entre los supuestos 'casuals' es algo patente que quedó plasmado este lunes, tras la voluntad de marcharse todos de la sala, si uno de ellos era expulsado.
Asimismo, ha criticado "suspiros y bostezos" a lo largo de todo el juicio oral, y ha ironizado en la posibilidad de que estas actitudes sean aceptables en tiempos modernos, sin que él las pueda llegar a entender.
Cavero también ha recordado que los incidentes de este lunes ya se han remitido al Juzgado de Instrucción 24 de Barcelona, que será el que los investigará.
ALTERCADOS
Los altercados de este lunes empezaron cuando uno de los acusados interrumpió a la juez --que relataba el cambio en las medidas de seguridad-- para quejarse del despliegue policial, tras lo que el tribunal ordenó su expulsión.
Al verlo, gran parte de los 'casuals' sentados en el banquillo se levantaron e intentaron abandonar el juicio insistiendo que si su compañero se iba "se iban todos", lo que los Mossos impidieron y empezó un intercambio de agarrones, que acabó con alguno de los acusados reducido por las fuerzas de seguridad.
Varios acusados también insultaron a los periodistas que estaban en la sala del juicio con frases como "perras, sólo contáis mentiras".