MADRID, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
El fiscal Enrique Molina solicitó hoy prisión provisional para el líder de Askatasuna Juan María Olano por su pertenencia a Gestoras Pro-Amnistía, sumario pendiente de juicio en el que se encuentra imputado y por el que permanecía hasta el momento en libertad condicional con una fianza de 60.000 euros, después de que liderara a principios de este mes una manifestación pro-amnistía en San Sebastián declarada ilegal por la Consejería de Interior del Gobierno Vasco.
La petición se produjo durante la celebración, por parte de la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal, de una vistilla a puerta cerrada que se prolongó durante 10 minutos escasos. El tribunal presidido por el juez Fernando Bermúdez de la Fuente tomará su decisión mañana, informaron fuentes jurídicas.
El líder de Askatasuna fue conducido a las dependencias judiciales desde la cárcel de Soto del Real donde se encuentra encarcelado en relación con otra causa --las diligencias previas abiertas en relación con Askatasuna-- después de que el juez Baltasar Garzón decretara su ingreso en prisión por estos mismos hechos el pasado 11 de septiembre, al considerar que Olano había cometido un delito de inducción al terrorismo callejero.
Su presencia en la Audiencia Nacional coincidió con la celebración de un juicio contra 9 presuntos miembros de Segi acusados de la distribución de 'zutabes'. Varios de los familiares de los acusados que se encontraban en los pasillos esperando el fin de esta vista oral irrumpieron en gritos de '¡Olano, Olano!' al reconocerle cuando era trasladado esposado por los agentes hasta la sala donde se celebraba la vistilla.
La abogada defensora del miembro de la izquierda abertzale Amaia Izko defendió ante la Sala la imposibilidad de ordenar el encarcelamiento de su cliente dos veces por los mismos hechos y pidió que Olano continúe disfrutando de la libertad condicional como imputado de Gestoras. Su defendido se negó a declarar ante el tribunal.
Olano se encuentra en la cárcel de Soto del Real (Madrid) desde el pasado día 11, cuando el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón acordó contra él esta medida cautelar, comunicada y sin fianza, al considerar que su presencia en la manifestación que se celebró dos días en San Sebastián constituía indiciariamente un delito de integración en organización terrorista, por el que ya estaba procesado en el sumario de Gestoras, y otro de inducción al terrorismo callejero.
PARA QUE NO REINCIDA
Según explicó la Fiscalía en un escrito remitido a la Sala el pasado lunes, "de permanecer en libertad provisional", Olano "reincidirá en las actividades delictivas que se le imputan, como ya lo hizo" en la marcha de San Sebastián. A su entender, el dirigente de Askatasuna ha mostrado "que le resulta indiferente su vinculación y obligaciones procesales" por lo que el riesgo de fuga en caso de permanecer en libertad reaparece a estas alturas, cuando la celebración de la vista oral contra los acusados por pertenencia a Gestoras se encuentra ya muy próxima".
El dirigente de Askatasuna fue procesado por el delito de integración en organización terrorista en octubre de 2002. Un año antes se decretó su ingreso en prisión y se dictó una orden de busca y captura en su contra, al haberse sustraído a la jurisdicción del Juzgado Central de Instrucción número 5, del que es titular el juez Garzón.
Fue detenido en Francia el 3 de diciembre de 2001 y extraditado a España, donde permaneció encarcelado hasta septiembre de 2005, momento en que fue puesto en libertad por la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal bajo una fianza inicial de 300.000 euros que fue posteriormente rebajada a 60.000.
A pesar de que la medida pretendía garantizar que no eludiría la acción de la Justicia, la Fiscalía considera que, a pesar de que ha permanecido en España, "ha reiniciado la actividad por la que fue procesado".
Volvió a ser detenido de nuevo el pasado día 9 de septiembre con ocasión del "liderazgo de las acciones desarrolladas por Gestoras Pro Amnistía-Askatasuna en homenaje al preso de ETA Juan José Vidal", hechos por los que fue acusado en un inicio del delito de desórdenes públicos por los Juzgados de San Sebastián.
La Fiscalía solicitó entonces a Garzón su encarcelamiento por reiteración del delito de integración e inducción al terrorismo callejero. El magistrado decidió encarcelarle al considerar que Olano, "como representante de Askatasuna, directamente o bajo el manto del denominado Movimiento Pro Amnistía", trató de "escenificar un auténtico desafío a las instituciones incitando a la comisión de delitos terroristas".
Su acción se enmarca, según el auto de Garzón, "en el conjunto de acciones terroristas gravísimas desarrolladas por ETA, parte de las cuales se insertan con un tándem armónico y articulado, en los diferentes frentes".
