MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio Fiscal ha retirado este jueves el delito de blanqueo de capitales de los cargos que se le imputan al capo de la mafia rusa Tariel Oniani, modificando así sus conclusiones provisionales, y rebajando su petición a cuatro años de prisión por el cargo de asociación ilícita.
De esta forma, a pesar de que España había solicitado su extradición también por el delito de blanqueo, al considerar Rusia que ese delito estaba prescrito, sólo puede ser juzgado, y por lo tanto condenado, por asociación ilícita en los términos del Código Penal vigente en 2005, cuando huyó del país.
El fiscal anticorrupción de la Audiencia Nacional José Grinda considera que Oniani es un 'ladrón en ley', perteneciente a la organización criminal 'Kutaiskaya', implantada en España. Pero su defensa ha negado que su patrocinado lo sea o que pertenezca a una organización criminal. Además, sostienen que los delitos que se le imputan han prescrito y alegan dilación indebida del procedimiento. Por todo esto ha exigido la absolución de su cliente.
Para el fiscal Grinda hay elementos probatorios suficientes para considerar que Oniani es un 'ladrón en ley' y ha apuntado que esa figura opera en asociación ilícita, algo que se aleja de la imagen que dio el acusado en su declaración ante el tribunal. "No tiene nada que ver con la figura mítica que han intentado vendernos aquí", ha añadido.
De hecho, en su exposición de conclusiones definitivas, el Ministerio Público ha enumerado una serie de hechos que vinculaban al acusado con personas que también son consideradas 'ladrones en ley' y con acciones y sentencias internacionales que derivarían de su actividad delictiva.
El propio Oniani, quien ya en su declaración negó ser un 'ladrón en ley' y apuntó que la organización criminal 'Kutaiskaya' era un "mito", este jueves ha indicado que él no ha cometido ningún delito. "No he cometido ningún delito, no soy culpable de nada, y pido que me quiten todos los cargos de los que se me acusa", ha señalado con ayuda de un traductor.
ESCAPÓ GRACIAS A UN CHIVATAZO
Oniani fue entregado en octubre de 2019 a España por las autoridades rusas para ser juzgado después de que escapara en 2005 de ser detenido por la policía gracias a un chivatazo. Este 'ladrón en ley' de origen georgiano se encuentra en la actualidad en situación de apátrida, pues Rusia le ha retirado la nacionalidad después de que cumpliese 10 años de cárcel por el secuestro de un empresario.
Se le considera peligroso y de hecho, por instrucción de Instituciones Penitenciarias durante los tres días que ha durado el juicio oral, el acusado ha comparecido ante el tribunal de la Sala de lo Penal tras una mampara de seguridad. Desde su llegada a España en 2019, se encuentra en la prisión de Soto del Real y en régimen FIES, el de internos con especial seguimiento.
En su escrito de acusación, el Ministerio Público considera que Oniani es un 'vor v zakone', el rango más alto de jerarquía dentro de este tipo de organizaciones criminales, lo que implica dedicación en exclusiva a actividades delictivas y conlleva necesariamente que todo su capital, como el que se sospecha habría estado blanqueando en España entre 1995 y 2005, tenga origen ilícito.
Asimismo le atribuye el liderazgo de la 'Kutaiskaya', una organización criminal interrelacionada con otras encabezadas a su vez por 'ladrones en ley', que se habría asentado en España consolidando un importante entramado empresarial para aflorar dinero procedente de todo tipo de actividades delictivas, desde el tráfico de drogas hasta la extorsión.