El Gobierno concede el Collar de la Orden del Toisón de Oro a Sarkozy por su "cooperación" en la lucha contra ETA

Actualizado: viernes, 25 noviembre 2011 14:53

MADRID, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno ha concedido este viernes al presidente francés, Nicolás Sarkozy, el Collar de la Insigne Orden del Toisón de Oro "por su cooperación y compromiso en la lucha contra el terrorismo", según ha anunciado el ministro portavoz en funciones, José Blanco.

Sarkozy ha mantenido con el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero una estrecha colaboración en la lucha contra ETA que el presidente del Gobierno ha elogiado en más de una ocasión. Prueba de ello es que en el último año han sido detenidas en Francia 26 personas por su implicación con actividades relacionadas con la banda terrorista.

Además, en los últimos años se ha descabezado en numerosas ocasiones la cúpula de la banda por medio de operaciones desarrolladas en distintos puntos de la geografía francesa.

La Insigne Orden del Toisón de Oro consta de un gran collar de oro compuesto de eslabones dobles en forma de B del que cuelga un carnero de oro, que representa al vellocino de la mitología griega y al carnero de Gedeón. Esta condecoración la impone el Rey, que también posee Toisón de Oro y que en su caso le entregó su padre, Don Juan de Borbón, en 1941.

El collar era el símbolo de la orden de caballería del mismo nombre creada en 1429 por el duque Felipe el Bueno de Borgoña con motivo de su matrimonio con Isabel de Portugal. Nació en un principio para defender la religión católica.

En 1477, cuando María de Borgoña se casó con Maximiliano de Austria, la orden pasó a la casa de Habsburgo y contó con la protección especial de Carlos V. Con la llegada de la casa de Borbón a España se mantuvo simultáneamente en Austria hasta 1818 (cuando se abolió la monarquía) y en España hasta 1931, con la II República. Fue Don Juan Carlos quien recuperó su vigencia y, en la actualidad, es la más alta distinción que concede la Casa Real española.

El Collar del Toisón de Oro no es hereditario ni transmisible, por lo que cada insignia, que está numerada, debe ser devuelta cuando fallezca su titular. Entre las más de 20 personalidades a las que el rey ha impuesto el collar figuran el ex secretario general de la OTAN y ex jefe de la diplomacia europea Javier Solana y varios monarcas como el rey de Arabia Saudí o el emperador japonés Akihito.