De la Vega recuerda al PP que los políticos deben "dar ejemplo" ante la corrupción y luchar "de verdad" contra ella por "decencia"
MADRID, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno cree que el hecho de la clase política en general y los partidos en particular sean ya la tercera preocupación de los españoles según el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) tiene que ver con algunos "acontecimientos derivados de la acción política" y, en concreto, está convencido de que los debates con los se ponen en cuestión las instituciones y su funcionamiento "no favorecen el apego y el afecto al sistema democrático".
Así lo aseguró hoy, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, cuando fue preguntada sobre la creciente desafección de los ciudadanos a la política a la que apuntan los sondeos del CIS desde hace algunos meses.
"El Gobierno comparte y comprende la preocupación de los ciudadanos ante algunos acontecimientos derivados de la actuación política", explicó la también ministra de la Presidencia. Precisamente por eso, dijo, el Ejecutivo se afana "día a día" en defender la "fortaleza del Estado de Derecho y el correcto funcionamiento de las instituciones".
Sin citar al PP, al que tanto desde el Gobierno como desde el PSOE se ha acusado de cuestionar las instituciones democráticas, De la Vega recalcó que la política requiere también una "labor pedagógica" y que "la legítima confrontación política" puede "ser crítica" pero debe producirse siempre desde "la defensa de las instituciones democráticas para que sean fuertes, solventes y poderosas".
TODOS SIN CONTEMPLACIONES CONTRA LA CORRUPCIÓN
De la Vega aprovechó la pregunta sobre el CIS dejar también claro que el Gobierno "eleva la voz" ante la corrupción. "No tiene color político, venga de dónde venga, tolerancia cero", proclamó, incidiendo en la necesidad de que "todos, sin contemplaciones" actúen para atajar "una lacra deleznable que no se puede tolerar"
Después, cuando se le pidió opinión sobre el Código Ético aprobado por el PP y el documento para luchar contra la corrupción que el partido de Mariano Rajoy ha trasladado al resto del arco parlamentario, la vicepresidenta dio la bienvenida a cualquier iniciativa que nazca para "luchar de verdad" contra un fenómeno, que, recordó "no es de hoy".
Eso sí, tras dejar claro, que el Gobierno analizará cualquier propuesta en este sentido, hizo hincapié en que los políticos deben "dar ejemplo ante los ciudadanos" y actuar contra la corrupción "venga de dónde venga" por "responsabilidad y decencia" como, a su juicio, ha hecho el Ejecutivo reformando la Ley del Suelo, dando transparencia a los bienes de los miembros del Gobierno y dotando de más medios a la Fiscalía Anticorrupción.
Las encuestas sobre intención de voto publicadas en los últimos días también salieron a colación durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, pero De la Vega eludió valorar las que amplían la ventaja del PP sobre el PSOE o sitúan a Mariano Rajoy con mejor nota que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, alegando que la función del Ejecutivo no es comentar los estudios de opinión.
"No es momento de valorar encuestas, ya sean buenas o no buenas, sino de trabajar", enfatizó De la Vega, quien insistió en que el Gobierno tiene todos sus esfuerzos dirigidos a superar la actual crisis económica que es la principal preocupación de los ciudadanos.
EL GOBIERNO HA HECHO TODO LO QUE HABÍA QUE HACER
Respecto a la actuación del Ejecutivo en este ámbito durante el año que termina, la vicepresidenta subrayó que desde el "minuto cero" se empezaron a tomar medidas para paliar las consecuencias de la crisis y especialmente para proteger a los más afectados por la misma desde el convencimiento de que "los trabajadores", que no son culpables de la situación, no tienen por qué pagarla.
"Hemos hecho todo lo que había que hacer. El Gobierno ha hecho un trabajo razonablemente positivo, una gestión razonable frente a una situación de dificultad", resumió la portavoz gubernamental, quien agregó que en los últimos meses algunos indicadores ya han empezado a reflejar los frutos de las medidas adoptadas por el Ejecutivo.
En este contexto, explicó que su previsión es que en 2010 España vuelva a crecer de nuevo y se consolide la tendencia a la baja en la destrucción de empleo. "Confiamos en que la situación mejorará para todos", comentó.
