SAN SEBASTIAN, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Juan José Ibarretxe, afirmó hoy que "no existe" futuro para Euskadi, "si no es dentro del conjunto de la Unión Europea". Además apostó por un modelo europeo "participativo" que ponga "en activo el papel de los pueblos, de las naciones sin Estado como Euskadi", para hacer frente al "déficit democrático" europeo, a su juicio, una de las causas de "la crisis europea, perfectamente superable".
Ibarretxe realizó estas declaraciones en San Sebastián durante la inauguración del curso de verano de la Universidad del País vasco (UPV) '50 aniversario de la Unión Europea: Éxitos y desafíos' que se celebra en el Palacio Miramar de la capital guipuzcoana.
Junto a Ibarretxe participaron en el acto inaugural el rector de la UPV, Juan Igancio Pérez, el presidente de Eurobask, José María González, el profesor de la facultad de Derecho de la UPV Francisco Javier Quel, y el secretario general de Eurobask, Juan José Álvarez Rubio.
El lehendakari destacó que "no existe el futuro de Euskadi, si no es dentro del conjunto de la Unión Europea", y señaló que, "afortunadamente, el proceso de integración es imparable, pero no es suficiente porque es absolutamente necesario recuperar ilusión popular en relación con el proceso de integración" europeo.
En este sentido, Ibarretxe afirmó que se debe "pasar de un contrato de estado a uno social con la ciudadanía y los pueblos de Europa". El lehendakari aseguró que "la crisis europea existe pero es perfectamente superable", y apuntó como una de sus causas la "desconfianza entre los propios gobiernos".
"NUEVOS AGENTES"
Asimismo, se refirió al "egoísmo de los estados" y a su "visión de negocio", y al "déficit democrático" existente en la Unión Europea. En este sentido, apostó por "un modelo de participación" con el que crear "un proyecto ilusionante".
Según señaló, "no se trata de negar el papel del Estado, sino poner en activo el papel de los pueblos, de las naciones sin Estado, como Euskadi". "Nuevos agentes reclamamos tener una misión, que no ponemos palos en las ruedas del proyecto europeo, sino que somos agentes activos", añadió.
Por otro lado, Ibarretxe lamentó que Europa también padece "una crisis de liderazgo alarmante" porque "no existen ideas, ni derechos que hagan creíble, posible, ni ilusionante la idea de Europa cuando más necesario es". A su juicio, el proceso europeo pasa por "un huracán de destrucción creativa" y destacó que "necesitamos más de Europa tanto en el ámbito de política interior como en política exterior".
De esta forma, Ibarretxe consideró que "para recuperar la ilusión" en el proyecto europeo se debe "valorar el mercado interior" que, a su juicio, ya que, "si no logramos generar prosperidad desde el proyecto de Europa, acabaremos dándole la espalda". Asimismo, señaló que no se puede olvidar "la dimensión social" del proyecto europeo porque "mirar al mercado no significa dejar de mirar a las personas".
En cuanto a la política exterior europea, Ibarretxe lamentó que "hemos hecho el ridículo en los últimos años por no tener una personalidad propia" en esta materia, y recordó que el interés europeo no se va a sustituir nunca por el de los Estado que lo conforman". Además, apostó por "la lucha de la pobreza" como "una de las grandes oportunidades y objetivos" de la Unión Europea en política exterior.
Finalmente, el lehendakari destacó que "podemos criticar a Europa pero no destruirla" porque, al margen de la Unión Europea, "hace mucho frío". No obstante, Ibarretxe consideró que se acertará en la construcción de proyecto Europa si no "caminamos por necesidad", sino por "convicción".