Ibarretxe trasladó a Zapatero que el proceso de paz "ha merecido la pena" y que hay que intentarlo "una y mil veces"

Actualizado: miércoles, 20 junio 2007 17:11

Condicionó su implicación "máxima" en la lucha contra ETA al rechazo de "política de exclusión", Ley Partidos y política penitenciaria

MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, destacó hoy tras reunirse con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que, a pesar de la ruptura de la tregua por parte de ETA, el proceso de paz ha sido un intento "honesto" que "ha merecido la pena" y que hay que intentarlo "una y mil veces para conseguir la paz". Según Ibarretxe, "ahora más que nunca" se necesita "de la política", porque lo contrario, señaló, sería "entregarle la gestión de la agenda política a ETA".

Ibarretxe aseguró su implicación en la lucha contra el terrorismo, en la defensa de los derechos humanos "de todos" y la solidaridad con las víctimas, pero puso sus condiciones: rechazo a la política de exclusión, a la Ley de Partidos, la política penitenciaria y al "todo vale".

En rueda de prensa tras la reunión de dos horas en el Palacio de La Moncloa, opinó que ello puede permitir "combatir la violencia e intentar lograr acuerdos políticos". Trasladó también a Zapatero que en la lucha contra la violencia "no vale todo".

Ibarretxe comunicó a Zapatero que la sociedad vasca, tras la ruptura de la tregua, tiene una "sensación de frustración", está "asqueda" con la decisión de ETA y "preocupada con una vueltra atrás hacia pasado destructivo". También dijo que está "cansada" de que "los políticos no alcancemos acuerdos".

Dicho esto, informó de que transmitió al presidente del Gobierno que, aunque "el esfuerzo no ha acabado bien" y que la ruptura de la tregua es un "final perverso", en esta vida "sólo se puede equivocar quien lo intenta". "Este intento --argumentó-- ha sido honesto, que a pesar de los aciertos y los errores, que de todo ha habido, este intento ha merecido la pena y le he trasladado que en esta vida y en política hay que arriesgar, que hay que intentarlo, que merece la pena intentarlo, que hay que intentarlo una y mil veces; que conseguir la paz en la sociedad vasca, que conseguir un acuerdo político para convivir entre Euskadi y España merece la pena que lo intentemos una y otra vez".

El lehendakari expuso a Zapatero la "implicación máxima" de las instituciones vascas en la defensa "de la libertad y de los derechos fundamentales de todas las personas" y concluyeron que "esta materia debe ser un espacio a compartir y no debe quedar de ninguna manera invadido por el debate político de las iniciativas legítimas que cada uno tenemos". Añadió también que habrá, por su parte, máxima implicación en las políticas de solidaridad y reconocimiento a las víctimas del terrorismo.

Sin embargo, al tiempo, precisó que si en este asunto no existen "matices" tampoco debe haberlos en trasladar a la opinión pública de que en la lucha contra el terrorismo "no vale todo". Y expuso el resto de sus condiciones: no están de acuerdo con la "política de exclusión", con la aplicación de la Ley de Partidos, que definió como una "fórmula del pasado", ni con la actual política penitenciaria. A su juicio, la citada Ley "nos aleja de la paz".

"No estamos de acuerdo --explicó--, no lo hemos estado nunca, con la política de exclusión y con la aplicación de la Ley de Partidos y no hemos estado nunca con una política de los derechos humanos que no se observe para todas las personas, también para las personas que han cometido horribles delitos y desde ese punto de vista las instituciones vascas reclamamos una y otra vez las decisiones que desde el parlamento vasco se ha hecho de manera reiterada para que se cumpla con una política penitenciaria acorde con los derechos humanos".

NO ENTREGAR A ETA "LA AGENDA POLÍTICA"

Ibarretxe trasladó también al jefe del Ejecutivo que, a pesar de que "hay quien dice que tras la ruptura de la tregua no es el momento de hacer política, nosotros no pensamos de esa manera". "Eso sería entregarle el timón de la agenda política a ETA. Si a ETA le decimos que mientras su violencia nauseabunda esté, nosotros no hablaremos de política, estaríamos dándole la gestión de la agenda y de los tiempos políticos". Revindicó que "ahora más que nunca necesitamos de la política y poner en marcha iniciativas nos puede permitir combatir por un lado la violencia e intentar acuerdos políticos por otro".

Concretó que el acuerdo político al que se refiere es "al que tenemos que llegar desde el siglo pasado. Seguimos teniendo pendiente el concluir un modelo de relación amable entre Euskadi y España. Cada vez que vengo a Madrid parece que nace de nuevo". "Para el pueblo vasco, los derechos históricos son la auténtica Constitución del pueblo vasco, y no es sólo pasado. Es sobre los derechos históricos, su actualización y desarrollo sobre lo que podremos buscar para convivir de manera amable en en siglo XXI entre Euskadi y España", indicó.

En cuanto al acuerdo de mínimos contra el terrorismo propuesto por el presidente del PNV, Josu Jon Imaz, respondió que el único acuerdo que se toma como referencia en un encuentro institucional es que "sigue habiendo un estatuto político, aprobado por mayoría absoluta en el parlamento vasco y al que el parlamento español dijo no". Añadió que ni el parlamento vasco puede imponerle nada al español ni al contrario y que "la referencia en términos de propuesta, la que es absolutamente válida, mientras no se presente una en el parlamento vasco que tenga más de 39 votos , es el estatuto político vasco".

Ambos políticos analizaron la situación y las perspectivas de la actividad de ETA tras la ruptura de la tregua. El lehendakari no quiso desvelar el contenido de este análisis.

REFERÉNDUM

No quiso desvelar cuál fue la respuesta del presidente a sus reivindicaciones ni tampoco quiso comentar las palabras de Zapatero de que no habría negociación tras el atentado de la T-4. Tampoco reveló si puso sobre la mesa el referéndum sobre autodeterminación que el parlamento vasco aprobó que se realizaría en esta legislatura. Ibarretxe se limitó a recordar que todo el mundo sabe, y también el presidente del Gobierno, que en el programa de su Ejecutivo se prevé que "nuestro compromiso es consultar a la ciudadanía a lo largo de esta legislatura. No hay nada nuevo al respecto". No comentó la posibilidad de consensuar un pacto similar al de Ajuria Enea y repitió que están dispuestos "a caminar" en los términos que hoy expresó.

En cuanto a las negociaciones para formar gobierno en Navarra, el lehendakari cree que en Madrid se hace "mal" hablando permanentemente de Navarra porque "si algo les preocupa a los navarros y navarras es tener la sensación de que su futuro se está decidiendo aquí, como nos preocupa también a los vascos en general". Recalcó que lo que vayan a ser los vascos se decidirá en Euskadi y pidió "respeto" hacia el futuro de Navarra.

En cuanto al acuerdo PP-PSOE en la diputación de Alava, el lekendakari celebró la política de pactos como "parte de la liturgia democrática", siempre que "no sean antinatura".

ANV Y CUPO

Respecto a ANV, dijo que hay mucha gente "frustrada y decepcionada" con esta formación política por la decisión de ETA de romper la tregua. Por ello, reclamó a ANV que reaccione puesto que pidieron su voto en las elecciones " a favor de un proceso de paz". "Una cosa --explicó-- es prestar sus listas a Batasuna y otra es aceptar los métodos que Batasuna ha mostrado en el pasado y que tienen el rechazo mayoritario de la sociedad vasca y, por tanto, tendrá que darse una reacción por parte de ANV ante cualquier tipo de manifestación violenta si no quieren perder el crédito que parte de la sociedad vasca les ha dado".

Zapatero e Ibarretxe abordaron en su encuentro la renovación del Concierto Económico Vasco. Al respecto el lehendakari pidió que no se traslade este asunto a la sociedad española como "un privilegio" si no como un "derecho que hunde sus raíces en la historia".