BILBAO 21 Sep. (EUROPAPRESS) -
El presidente aragonés, Marcelino Iglesias, aseguró hoy que Aragón "ni puede ni debe" gestionar en solitario la Cuenca del Ebro porque "la compartimos con muchas Comunidades autónomas". Iglesias defendió, por eso, "una gestión integral" de esa cuenca hidrográfica, "donde participen las Comunidades autónomas".
El responsable del Ejecutivo aragonés se manifestó así en declaraciones a los medios de comunicación después de que ayer el Gobierno central y la Junta de Andalucía acordaran la cesión de la Cuenca Hidrográfica del Guadalquivir a la Comunidad autónoma andaluza.
El presidente aragonés recordó que la Cuenca del Ebro integra a nueve Comunidades autónomas --Cantabria, Castilla León, País Vasco, La Rioja, Navarra, Aragón, Comunidad Valenciana, Cataluña y Castilla La Mancha--, y si bien la Comunidad aragonesa, "es una parte importante, porque aporta el 40 por ciento de los caudales", "un río como el Ebro, tan compartido" requiere "que se mantenga una gestión integral y compartida".
Al respecto, comentó que la gestión desarrollada por las confederaciones hidrográficas en España "ha funcionado bien", por lo que incidió en seguir mantenido esa gestión integral de la Confederación Hidrográfica del Ebro, que sea "compartida" por las Comunidades autónomas afectadas.
Iglesias compareció ante los medios de comunicación tras reunirse con el presidente de la región francesa de Aquitania, Alain Rousset, en Bilbao, donde ambos participan en un encuentro de la Comunidad de Trabajo de los Pirineos (CTP), que este año celebra su 25 aniversario.