ASESGC denuncia que el 60 por ciento renuncia porque pasa a cobrar menos y pierde categoría
MADRID, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio del Interior pretende que los suboficiales de la Guardia Civil que renuncien al ascenso no puedan ocupar un nuevo puesto como jefes de unidad, ni acceder a puestos de libre designación, habitualmente correspondientes a materias 'sensibles', tales como la lucha antiterrorista o contra el crimen organizado. Hasta ahora, los agentes que rechazaban la promoción quedaban "inmovilizados" en sus puestos, pero, con la nueva ley, la gran mayoría perderá además su destino.
Este es uno de los puntos que ha despertado las críticas entre los mandos intermedios del Cuerpo, de los recogidos en el borrador de una orden ministerial que envió el sábado el Ministerio del Interior a todas las comandancias del país. El proyecto "concreta" las particularidades que deberán afrontar los guardias civiles a la hora de ocupar un destino o trabajar en una comisión de servicio.
El texto llegó "por sorpresa" a las comandancias, con el horizonte de que la Dirección General recibiera los informes de sus respectivos jefes antes de las 13:00 horas de ayer lunes. La "urgencia" con la que se ha remitido la orden interna da indicios de la "forma inminente" con la que pretende ser aprobada, según informaron a Europa Press fuentes de la ASESGC, asociación mayoritaria de mandos intermedios de la Guardia Civil.
La Asociación de la Escala de Suboficiales de la Guardia Civil (ASESGC) precisó que el 60 por ciento de los suboficiales rechazan el ascenso, ya que "paradójicamente" el paso de Sargento primero a Brigada supone una reducción de "hasta el 30 por ciento" en las retribuciones salariales y además la realización de funciones "de inferior categoría"
Por ello, denunció en un comunicado que el proyecto se traduce en "la pena de destierro" a estos suboficiales, al tiempo que muestra la "errática política de personal" de la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil. "Supone una presión y una amenaza intolerable a los suboficiales", remachó, para explicar que con el nuevo texto legal la gran mayoría de los mandos "perderá su destino, al impedírseles estar en un destino operativo".
En este sentido, ASESGC acusó a la Dirección General de defender una "política de engaño" al mostrar, por un lado, que "le preocupa la problemática de la pérdida de destino y las expectativas de carrera profesional", y por el otro, elaborar unas normas que "condenan" a la Escala de Suboficiales al "ostracismo". En este punto, explicó que el 80 por ciento de las vacantes están dirigidas a los destinos de mando de unidad o de libre designación.
"La culpa del elevado porcentaje de renuncias y el consiguiente colapso de los ascensos en los diferentes empleos es de la cúpula militar de Guzmán el Bueno", consideró la asociación profesional, antes de criticar que esta cúpula pretende "marginar" a los suboficiales de los destinos operativos de seguridad ciudadana y seguridad vial. Así, ve el borrador como una "norma coercitiva" que intenta "poner fin a la terrible sangría de renuncias".
RECOGIDA DE FIRMAS
Frente a la "ingente" cantidad de renuncias, ASESGC propone buscar sus causas y dialogar con la escala afectada a través de la propia asociación, la cual ya ha presentado "alternativas factibles y que no suponen coste económico alguno". En opinión de la organización, "este castigo" es "excesivo" para una escala "ya de por sí maltrecha".
"Los suboficiales no permaneceremos impasibles ante este grave atropello", avisó ASESGC, antes de adelantar que contactará con los miembros de la Comisión de Interior del Congreso, iniciará una campaña de recogida de firmes entre el colectivo afectado para que el proyecto sea retirado y "en última instancia" convocará una concentración de suboficiales a las puertas de la Dirección General, en Madrid.
Finalmente, explicó que, al parecer, el proyecto se remitirá a la Secretaria de Estado de Seguridad "sin pasar" por las asociaciones profesionales ni por el Consejo Asesor de Personal.
