LOGROÑO, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -
Izquierda Unida planteará en la próxima legislatura una batería de propuestas para que la ciudadanía sea "realmente partícipe de los asuntos públicos", frente al actual modelo de "democracia vacía", consistente "sólo" en votar cada cuatro años y convertida, a juicio de este partido, en un "espectáculo mediático entre dos grandes partidos que defienden una sociedad y unas políticas muy similares", según señala IU en un comunicado.
Así, Izquierda Unida apuesta por "democratizar" todas las instituciones del estado, empezando por la Jefatura de Estado, para lo que propondrá un referéndum en el que toda la ciudadanía pueda decidir el modelo de estado republicano o monárquico.
"La actual persistencia de la Monarquía, si pudo tener cierta utilidad durante la transición, hoy pone en cuestión el propio sistema democrático al establecer que la máxima institución del estado venga impuesta por vía hereditaria como consecuencia de una imposición hecha en su día por el ilegítimo régimen franquista", dicen desde el partido.
Para IU, este nuevo modelo democrático y republicano debe incluir también medidas que favorezcan la "democracia económica", a través de una mayor redistribución de la riqueza y justicia social. Del mismo modo, IU defenderá que derechos sociales y culturales como los derechos a la educación, salud, trabajo, vivienda, pensión digna, información veraz, etc, adquieran la categoría de exigibles por los ciudadanos, el establecimiento de un gran 'Pacto para la regeneración de la vida democrática y contra la corrupción' y la elaboración de una Ley de Participación Ciudadana que establezca los mecanismos para que las grandes decisiones que afectan a toda la ciudadanía, a nivel estatal o local, puedan decidirse mediante referéndum o consulta popular.
Por otro lado, Izquierda Unida exigirá en esta legislatura para apoyar cualquier investidura un compromiso de reforma de actual Ley Electoral, que en su opinión favorece a los dos partidos mayoritarios (PP y PSOE) frente a la tercera fuerza política estatal (IU) que es "la gran perjudicada" por una Ley que a su juicio impide hacer realidad el principio democrático de "una persona, un voto".
Esta reforma electoral iría encaminada a garantizar la proporcionalidad en el reparto de escaños. En una primera fase, modificando aquellos aspectos de la Ley que no precisan reforma constitucional: ampliación a 400 del número de diputados, reducción a uno del número mínimo de diputados por provincia y reparto de los nuevos diputados y los sobrantes de modo que se mejore la ratio población-diputados.
En una segunda fase, esta reforma supondría una modificación constitucional en la dirección de convertir la comunidad autónoma en la circunscripción electoral y asegurando "el interés público" en campaña electoral, garantizando la existencia de debates plurales (no bipartidistas) en la campaña electoral en los medios de comunicación.