BILBAO, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
El juicio del 'caso Calatrava' se celebrará el próximo 25 de octubre sin que comparezcan en él ni el arquitecto valenciano ni el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna. Santiago Calatrava pide que se retire la nueva pasarela que conecta el puente Zubi-Zuri, diseñado por él, con Isozaki Atea, por atentar contra "su derecho moral" a la integridad de la obra, que considera "artística". De esta forma, reclama una indemnización de 250.000 euros y, subsidiariamente, si no puede retirarse la nueva pasarela, pide tres millones de euros.
El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Bilbao celebró hoy en el Palacio de Justicia de Bilbao la audiencia previa del juicio por la demanda que el arquitecto valenciano Santiago Calatrava ha presentado contra al Ayuntamiento de Bilbao y dos promotoras por "vulnerar su derecho moral" como autor de la pasarela Zubi-Zuri.
En ella se señaló el próximo 25 de octubre como fecha de la vista oral, en la que no declararán ni el arquitecto valenciano ni el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, al no haberlo propuesto las partes.
La audiencia se celebró entre una importante presencia de medios de comunicación. Durante su celebración se resolvieron cuestiones procesales y se admitieron las pruebas que proponían los litigantes, que no solicitaron que declarasen ni Azkuna ni Calatrava.
El propio magistrado preguntó a las partes las razones por las que no era llamado a comparecer Santiago Calatrava, al considerarlo "conveniente", ya que el Ayuntamiento de Bilbao reprocha que el arquitecto valenciano ha hecho una pasarela en el puente Monteolivete de Valencia y algo similar en Venecia.
Sin embargo, los abogados del Ayuntamiento y las dos promotoras consideraron innecesaria la presencia de Calatrava en el juicio. Tampoco el demandante solicitó la declaración del alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, de modo que el juicio tendrá lugar sin que declaren ambos.
PERITOS
El juez admitió todas las pruebas periciales que aportaron las partes demandadas, que consisten en cinco dictámenes de arquitectos de renombre que consideran que no se vulnera "el derecho de autor" del demandante.
En el juicio declararán el subdirector técnico del área de Urbanismo en el Ayuntamiento de Bilbao, Mauro Valdivielso, los arquitectos bilbaínos Pablo Nistal, Antón Aguirregoitia e Iñaki Aurrekoetxea Aurre, y el catedrático de composición arquitectónica de la Universidad de Sevilla Enrique Carvajal Salinas.
Intervendrán también como testigos de Calatrava el director de su estudio de arquitectura, Fernando Villalonga Campos, y otro arquitecto, Emiliano González Galaz, que declarará sobre "la afectación estética" de la pasarela y la previa colocación de una estructura de mecanotubo junto a la misma.
La defensa de Calatrava, del bufete Broseta de Valencia, intentó que el juez admitiera una prueba pericial en su favor, que deberían haber presentado los profesores de la Escuela de Arquitectura de Valencia, Juan Cano y Miguel Campos González, pero se rechazó.
El magistrado indicó que el demandante debería, según la Ley de Enjuiciamiento Civil, haber planteado ese dictamen con la demanda o, al menos, haberlo anunciado en ese momento o solicitado un perito designado por el tribunal. Pese al recurso presentado en la vista, el juez desestimó la petición por considerar que no se acomoda a las previsiones legales.
En cambio, sí admitió un reconocimiento judicial de la pasarela y sus aledaños, que tendrá lugar con anterioridad al juicio, de modo que el juez y las partes observarán el lugar y grabarán todo cuanto consideren oportuno, para que quede constancia en el procedimiento.
