SEVILLA, 10 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Sevilla juzga mañana a un joven marroquí de 29 años acusado de violar a una joven en Utrera (Sevilla) tras acompañarle a su habitación en un hostal, donde se suponía que habían quedado con más amigos, llegando a esposarla para intentar llevar a cabo la agresión sexual, hechos por los que la Fiscalía de Sevilla reclama ocho años de prisión.
Según el escrito de acusación provisional del fiscal, al que tuvo acceso Europa Press, los hechos tuvieron lugar el 18 de abril de 2005 cuando la supuesta víctima acompañó al procesado, B.H., hasta el hostal creyendo que habían quedado con unos amigos. Sin embargo, una vez allí, el acusado "insistió en que ambos tomaran un baño", a lo que ella se negó.
Ante la insistencia de B.H., la chica terminó "por acceder y entró en el cuarto de baño", donde se quitó toda la ropa menos la interior y se metió en el jacuzzi. Poco después se metió él en la bañera, donde supuestamente usó unas esposas para anclarle las manos.
En ese momento la mujer pudo sacar las manos de las esposas y huyó hasta la habitación, donde él logró alcanzarla, intimidándola con una navaja, "con la que llegó a provocarle un corte en el brazo, para que no escapara".
Así, la empujó a la cama, y tras golpearla, "la penetró vaginalmente". Durante la noche ella intentó huir, pero la habitación estaba cerrada con llave y la tenía él. Ya al amanecer la joven le pidió que la dejara salir que tenía que ir a trabajar, a lo que accedió advirtiéndole: "Si me denuncias, antes que llore mi madre llorará la tuya".
Para el fiscal, los hechos, que constituyen un delito de agresión sexual por el que reclama una condena de ocho años de prisión, suponen además una falta de lesiones, por la que solicita una multa de dos meses a razón de seis euros diarios. Además, pide una indemnización de 12.000 euros para la víctima.
