MADRID, 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
El coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, afirmó ayer que "en toda tierra de garbanzos 4,97 es 5", por lo que recalcó que sería una "muestra de sectarismo y una burla" que IU-ICV no pudiera hacer grupo parlamentario propio con ERC por quedarse a tres centésimas de ese cinco por ciento necesario por ley.
En declaraciones a TVE recogidas por Europa Press, aseguró que el miércoles le comentó al secretario de Organización del PSOE, José Blanco, que el Parlamento "no puede ser una nueva ley del embudo para las minorías", ya que "bastante ley del embudo es la ley electoral". Además, agregó que aunque él respeta mucho a las fuerzas que están en el grupo mixto, un millón de votos "debe dar un plus a IU en el Parlamento y tiene que ser motivo para una actitud abierta".
"Decirle a una formación política que con otras tiene el 4,97 por ciento, que por el 0,03 no tiene grupo parlamentario, es una burla. Es una burla por parte de los mismos que en el Senado se las van a arreglar para que CiU tenga grupo, y para que el PNV también tenga. En este caso, prácticamente saltándose el reglamento del Senado", planteó.
Llamazares explicó que este grupo con ERC tendría un carácter "técnico", que se podría denominar "de las izquierdas", y que no tendría coincidencia "ni ideológica ni política", pero que "permitiría aligerar un grupo mixto hoy por hoy impracticable". "Con ERC tenemos un acuerdo básico, y si nos obligan a complementar ese grupo, tendremos que hacerlo al final", añadió.
INVESTIDURA DE ZAPATERO
Por otro lado, indicó que el miércoles también le dijo a Blanco que para IU es "requisito indispensable" para apoyar la investidura de José Luis Rodríguez Zapatero, que haya un compromiso "claro con la regeneración democrática y, dentro de ella, con la reforma electoral". Además, señaló que tiene la impresión de que Zapatero buscará algún "acuerdo sólido" con alguna de las fuerzas nacionalistas.
A su juicio, "no se puede aplazar" la reforma de este sistema electoral, y agregó que ahora todas las fuerzas políticas deben ser "consecuentes y modificar un sistema que fundamentalmente gravita sobre la tercera fuerza política del país y da un papel especial a fuerzas de ámbito territorial".
"En primer lugar le planteamos al Gobierno como requisito indispensable la reforma de la ley D'hont. En segundo lugar, tomar iniciativas sociales y políticas en favor de la reforma. Hemos abierto ya una campaña de firmas y pretendemos que esta iniciativa pueda llegar al Congreso con más de un millón de firmas que permitan reformar este sistema injusto y mayoritario", subrayó.
Sobre las diferencias internas en IU, dijo que éstas se deben a la propia vida interna de la organización, y no sólo al PCE. Según dijo, "probablemente hoy IU deba tener otra identidad" diferente a la de su fundación, que "siga siendo una identidad de izquierdas, alternativa, y que tenga otros métodos organizativos".
