Mari Mar Blanco: "El fin que quiere el PNV nunca ha sido una política que debilite a ETA, sino llegar a algún acuerdo"

Mari Mar Blanco en RNE
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Actualizado: jueves, 6 febrero 2014 10:55

Tacha de "horror" de víctimas de abusos policiales vayan a las aulas y teme que alimenten el odio a la Policía y la Guardia Civil

MADRID, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo (FVT), Mari Mar Blanco, ha subrayado este jueves que el PNV siempre ha buscado el fin de ETA por la vía de lograr algún acuerdo, no de debilitar a la banda, y en ese objetivo ha enmarcado las peticiones del 'lehendakari', Iñigo Urkullu, al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

"La política antiterrorista, o el fin que quiere el PNV, nunca ha sido aquella política que debilite a ETA sino que pueda llegar a algún acuerdo con ETA", ha dicho en una entrevista en RNE recogida por Europa Press en la que, "como víctima", ha defendido una "política y contundente" que permita no sólo debilitar a ETA sino hacer "que desaparezca definitivamente".

Blanco ha subrayado que es habitual que el presidente del Gobierno se reúna, de manera secreta o pública, con los presidentes de las comunidades autónomas y ha hecho hincapié en que el hecho de que Rajoy escuche a Urkullu "no quiere decir que tenga que variar su política penitenciaria y antiterrorista".

Es más, ha asegurado que confía en el mensaje de Rajoy de que "la política penitenciaria no va a cambiar". La hermana de Miguel Ángel Blanco, secuestrado y asesinado por ETA en 1997, ha subrayado que "ETA ha dejado de matar pero la Justicia no tiene que dejar de funcionar". "A ETA nada le debemos y nada le daremos", ha remachado.

Además, ha recordado que las peticiones del PNV no son nuevas y que durante años este partido ha presentado iniciativas en el Parlamento vasco para pedir la competencia de política penitenciaria, el fin de la dispersión, "incluso la puesta en libertad de terroristas".

Blanco ha cargado además contra la decisión de que las víctimas de abusos policiales, y no sólo las del terrorismo, vayan a ofrecer testimonios en las aulas del País Vasco. A su juicio, la medida es "un auténtico horror" porque supone intentar "volver a la vieja teoría del conflicto, la equidistancia y la ambigüedad".

Pero además, ha dicho que le da "muchísimo miedo" que con esos testimonios "se siga alimentando el odio y el rechazo" a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en el País Vasco y no se permita "asentar las bases del relato" en el que quede claro que ha habido asesinos y víctimas.

A su juicio, lo importante es que nadie pueda volver a legitimar la violencia terrorista. Según ha dicho, ella no ha hablado en ningún colegio del País Vasco porque nunca la han invitado, pero sí en colegios de la Comunidad de Madrid y nunca ha transmitido "el más mínimo rencor ni odio".

Preguntada si será candidata en la lista del PP a las elecciones europeas, ha asegurado que nadie le ha propuesto nada en ese sentido pero se lo pensará "si se produce esa llamada". Ante las acusaciones de que el PP ha vasco ha "moderado el mensaje" en la lucha antiterrorista, ha replicado que "la gente que se ha ido no se ha llevado los valores y los principios", que siguen en el PP vasco.

EL OBJETIVO DE LAS VÍCTIMAS ES ETA, NO EL GOBIERNO

Según ha dicho, le da "muchísima pena" la "imagen de división" de las víctimas del terrorismo que se está trasladando a la sociedad porque, en su opinión, todas deben tener muy claro que su "objetivo común no es el gobierno del PP, sino la organización terrorista". Mientras se critica la política antiterrorista, ha avisado, se pierde "un momento para seguir reclamando la disolución de ETA".

A Blanco le parece bien que otros partidos --Vox y UPyD-- estén incorporando y "utilizando nombres de víctimas" a las que ha dicho respetar muchísimo y ha añadido que el PP "no tiene ningún nombre porque para el PP todas las víctimas son sus referentes".

La presidenta de la Fundación ha dicho que confía en llegar a un País Vasco "donde la convivencia democrática sea posible". Según ha dicho, no se puede negar que "hoy se vive mejor" que cuando ETA mataba, pero ha discrepado de quienes quieren "pisar el acelerador y no mirar por el retrovisor".

Mari Mar Blanco ha subrayado que los partidarios de ETA "están haciendo política pero no son demócratas" y ni han pedido perdón, ni han reconocido el daño causado ni reconocen a las víctimas del terrorismo. En su opinión, quienes piden "generosidad" lo hacen "de manera interesada" y las víctimas no quieren "venganza" sino que "se aplique la Justicia".

En cuanto al perdón, ha puntualizado que es algo "muy íntimo de cada persona" y que en su caso personal "el que tiene que perdonar desgraciadamente no está aquí". "Yo personalmente no perdono porque a mí nadie me ha pedido perdón nunca", ha dicho, recordando que los asesinos de su hermano --Francisco Javier García Gaztelu, 'Txapote', y Irantzu Gallastegi-- "están muy orgullosos de haber asesinado".

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