BARCELONA, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha descartado este martes que el debate soberanista que vive actualmente Catalunya cause preocupación exterior o frene inversiones extranjeras, en el transcurso de la visita oficial a Brasil que realiza estos días y a tenor de lo observado durante su viaje.
"No he visto que aquí haya preocupación sobre el proceso soberanista que vive Catalunya, ni veo ninguna barrera que signifique parar determinados procesos de inversión", ha precisado tras acudir al centro de capacitación que la compañía Gas Natural Fenosa tiene en la favela de Cantagalo de Rio de Janeiro, ha informado la Generalitat en un comunicado.
Asimismo, ha considerado que si alguna vez se hacen este tipo de reflexiones "es más por la presión de las instituciones del Estado" y no porque se vea este tipo de procesos con preocupación, ya que fuera de Europa lo que causa inquietud es el futuro de la Unión Europea (UE) y el euro, ha precisado.
"Pongo mucho el acento en el derecho a decidir y subrayo que es un proceso radical y escrupulosamente democrático y pacífico", ha asegurado Mas que explica cuando alguien le pregunta por el tema, y que pese a ello el Gobierno central no ha escuchado hasta el momento el posicionamiento del pueblo catalán con suficiente interés.
El presidente de la Generalitat ha aplaudido la iniciativa social en Rio de Janeiro de Gas Natural Fenosa, porque "el alma económica tiene que ir acompañada del alma social", y ha trazado un paralelismo con Rio en el esfuerzo realizado en Barcelona hace años para revertir algunas situaciones de barraquismo que se vivían en la capital catalana.
Antes de esta visita, Mas ha inaugurado el seminario 'Barcelona - Rio de Janeiro: ciudades de marca', organizado por la Federación de Industrias de Rio de Janeiro (Firjan) y el apoyo de ACC1Ó, en el que han participado unas 200 empresas catalanas y brasileñas.
El encuentro quería poner de manifiesto que la celebración de eventos deportivos como los Juegos Olímpicos tienen la capacidad de transformar el tejido urbano y cambiar la estructura empresarial de las ciudades, como sucedió en Barcelona en 1992 y puede suceder en Rio en 2016.
Mas se ha reunido también con el gobernador de Rio de Janeiro, Sérgio de Oliveira Cabral, ha visitado el estadio de Maracaná de la mano de una empresa catalana encargada del mantenimiento del césped del campo, y ha acudido a las obras de la Villa Olímpica, proyectadas también por un despacho de arquitectos barcelonés.
