Memoria.- El PP advierte de que no aplicará políticas "llamadas de memoria" si llega a gobernar

BARCELONA, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -

El diputado del PP en el Congreso y ponente de la ley de memoria histórica, Jorge Fernández Díaz, advirtió hoy de que "nadie espere que un Gobierno del PP esté a favor de políticas llamadas de memoria", y aseguró que un eventual Ejecutivo de Mariano Rajoy no pondrá en práctica medidas como las que prevé el proyecto de ley de memoria histórica en trámite en el Congreso, por considerarlas "políticas de división de los españoles".

En una entrevista de Europa Press, evitó detallar si la voluntad del PP pasa por derogar o modificar la ley, en caso de llegar al Gobierno después de que ésta se haya aprobado en esta legislatura, pero aseguró que el PP "es un partido predecible" y "nadie puede esperar que aplique políticas de memoria como las que pide IU".

El diputado del PP señaló, no obstante, que su partido "no tiene ningún problema en apoyar" otros aspectos de la norma, especialmente los que "reconocen y amplían derechos que son razonables y justos, estableciendo compensaciones económicas a las personas que se vieron perjudicadas por la Guerra Civil o la postguerra".

Aun así, remarcó que para tomar medidas de este tipo "no hacía falta esta ley", y señaló que "en los últimos años", con gobiernos de UCD, de Felipe González (PSOE) y del PP se habían aprobado ya decretos con medidas de este tipo; la última, en 2005, para los llamados 'niños de la guerra' que viven en Rusia.

"Cuando hay buena fe y se trata de ahondar en el espíritu de reconciliación y eliminar los elementos de división nos van a encontrar siempre", pero "no nos encontrarán nunca en normas que reabran heridas que nunca debieron abrirse", aseveró Fernández Díaz.

El dirigente del PP calificó de "sarcasmo" las palabras del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al defender este sábado "la España serena" del PSOE, cuando "nunca ha habido tanta crispación en España como desde que gobierna Zapatero".

"LA AGENDA LA MARCAN LOS RADICALES".

Fernández Díaz consideró la ley de memoria histórica como el "ejemplo paradigmático" de que, con Zapatero en el Gobierno, "la agenda política en España la están marcando los radicales", además de una muestra del "gran drama" de la "división entre los españoles" que, en su opinión, practica el presidente del Gobierno.

El diputado del PP acusó a Zapatero de "no creer en España", al haber afirmado que "la nación española es un concepto discutido y discutible".

El dirigente del PP de Catalunya reprochó también a Zapatero que "desde el día de su investidura" dijese que "la II República es el referente histórico de la Constitución Española", una afirmación que consideró que debería haber obligado a "apear" a Zapatero "de su cargo".

"Si hay un periodo de la historia de España que todos hemos de procurar que no se vuelva a repetir es el de la II República --dijo--, porque nos llevó directísimamente a la mayor tragedia colectiva que ha sufrido España, que es la Guerra Civil".

El ponente del PP en la ley de memoria histórica acusó a Zapatero de querer "imponer por ley su concepción de la historia", algo que consideró propio "sólo de los países con regímenes autoritarios". "El concepto de memoria histórica tiene un origen que no tiene nada que ver con la democracia liberal europea", señaló, para apoyar su determinación de no aplicar este tipo de políticas si el PP gobierna.

Fernández Díaz consideró que la ley promovida por el PSOE es "innecesaria y sectaria" porque "pretende que 70 años después de la guerra triunfen las tesis de un bando", y denunció que, con ella, Zapatero pretende "dinamitar absolutamente los puentes sobre los que transitó la transición española y se construyó el consenso de 1978".